Sandalias de cuerda, el calzado plano y cómodo que triunfa en el norte
Mayte Salido, editora de compras de esta cabecera, ya lo adelantaba el pasado 17 de junio en este artículo: las rope sandals serían una de las grandes tendencias del verano. “Al igual que sucedió con las jelly sandals de The Row (otra de las grandes tendencias del momento), las sandalias rope aúnan comodidad, estilo y originalidad posicionándose como una opción irresistible por la que apuestan al unísono las que más saben de moda”, escribía entonces. No le faltaba razón, y lo comprobé en primera persona la semana pasada, durante mis vacaciones de verano en Cantabria. Allí, recalé en que las chicas más cool no solo habituaban a llevar una chaquetita ‘por si acaso’ y una tote bag con mensaje, también coincidían en lucir el calzado plano más cómodo, original y llamativo de la temporada: las sandalias de cuerda.
¿Qué son las sandalias de cuerda?
Pero ahí no terminaba la cosa, porque estas sandalias estaban por todas partes: en cada tiendecita de costa, concept store o mercadillo artesanal, me encontré con versiones —todas diferentes— de este mismo modelo. Y lo mejor: a cada cual más bonito. Pero, ¿qué son exactamente las sandalias de cuerda? Aunque el nombre pueda llevar a confusión, no hablamos de las clásicas sandalias romanas de tiras largas que suben hasta la pantorrilla. Estas son planas, muchas veces con suela de goma, y utilizan cuerdas trenzadas o anudadas que envuelven el empeine sin sobrepasar el tobillo.
Claudio Lavenia/Getty Images