Feng shui en el dormitorio para favorecer el descanso profundo
Una cama con respaldo, jamás con el cabecero bajo una ventana ni con los pies apuntando hacia la puerta; la pintura, suave y neutra; el espejo, que no nos refleje al dormir; todo en orden y nada bajo la cama; ni aparatos tecnológicos ni enchufes cerca de la cabeza; y decoración simétrica. A grandes rasgos, estas son las máximas del feng shui aplicadas al dormitorio.
Pero hay otros aspectos menos conocidos que resultan aún más importantes para esta tradición, como no tener móvil, iPad, televisión ni cualquier otro tipo de pantallas en el dormitorio. De hecho, esa es la regla número uno para un dormitorio terapéutico. Pero hay más, y en ellas se basan las habitaciones Feng Shui que ha creado ZEM Wellness Clinic Altea para maximizar los beneficios de su programa Sleep Boost, un protocolo personalizado que convierte el descanso en una poderosa herramienta regenerativa. Con ayuda de David de Cubas, psicólogo clínico y director de Salud en este centro, las esbozamos a continuación.
#1. Decorar con materiales naturales
Madera, cerámica y piedra han de primar sobre la ropa de cama de poliéster, los muebles de melamina o los vinilos para decorar de la pared. “Los materiales naturales tienen un impacto directo en nuestro bienestar nocturno. Pueden llegar a evocar entornos naturales y aportan una sensación inmediata de calma y autenticidad”, afirma David de Cubas.
En su opinión, esta conexión sensorial con la naturaleza ayuda a reducir el estrés y favorece la relajación: “Sabemos que simplemente con el contacto visual o táctil con materiales naturales puede disminuir la presión arterial y reducir la frecuencia cardíaca, señales claras de relajación fisiológica”, declara el psicólogo.
#2. Formas curvas, minimalismo y diseño orgánico
El experto asegura que “las formas curvas aportan tranquilidad a nuestro cerebro, por lo que nos ayudan a bajar los niveles de alerta emocional. Poder incorporarlas en el mobiliario y la decoración de un dormitorio genera una sensación de contención y refugio que favorece el descanso”. De Cubas defiende que “un entorno sobrecargado genera una sobreestimulación sensorial y cognitiva, mientras que el minimalismo bien aplicado, lejos de ser frío o vacío, se traduce en espacios serenos, cálidos y funcionales”.
En cuanto al diseño orgánico, “introduce formas inspiradas en la naturaleza, como olas, hojas o patrones suaves, que invitan a la introspección y la calma”, apunta el experto de ZEM Wellness Clinic Altea.
#3. Cuidar la iluminación
Se trata de un factor fundamental para cuidar los ritmos circadianos. “La estancia ha de quedar en total oscuridad para potenciar la producción natural de melatonina”, indica David de Cubas. Y mientras permanecemos despiertos, “la iluminación debe ser cálida e indirecta, utilizando para ello lámparas de mesa”, añade el psicólogo.