¿Quién invierte en criptoactivos en España? ¿Cuánto dinero tienen los inversores españoles en bitcoin, ethereum o fondos cotizados (ETF) ligados a las criptos? ¿Qué peso tienen los activos digitales en las carteras de los hogares? Con el atractivo de un bitcoin en zona de máximos históricos, una regulación sobre el sector ya vigente en la zona euro y una industria financiera que no ha querido perderse el interés mostrado por los inversores, conocer cuál es el perfil de este tipo de inversores se hace cada vez más relevante.
El Banco de España ha querido ahondar en este sentido, centrándose en el grado de penetración en los hogares y las características de aquellos que invierten en criptos, si bien la escasez de datos sistemáticos limita las conclusiones del estudio, que forma parte del Boletín Económico del tercer trimestre. El trabajo se realiza a partir de datos recabados en 2021 y 2022, en pleno criptoinvierno y antes de que la aprobación de los primeros ETF ligados a criptoactivos en Estados Unidos a comienzos de 2024, que supuso el verdadero despegue de estos activos, y la entrada en vigor de la directiva europea MiCA.
El perfil del inversor en criptos, apunta el estudio, es mayoritariamente el de un hombre joven, de menos de 45 años, que en un 33,8% de los casos reside aún con sus padres, cumpliendo casi a la perfección con la percepción acuñada desde hace años por el imaginario colectivo. Entre ellos, además, predominan un nivel educativo elevado: la proporción de individuos con estudios universitarios entre los tenedores de criptos supera en 10 puntos porcentuales a la del resto de la población y tienden a contar con niveles de conocimiento financiero más altos que la media. Una formación que les lleva a tener una mayor capacidad para asumir riesgos en sus inversiones a cambio de una rentabilidad futura presumiblemente más elevada: el 72% de ellos se posiciona así como amantes del riesgo, lejos del perfil tradicional del inversor español en el que predomina un marcado perfil conservador.
El estudio asegura además que aquellos inversores que cuentan con un mayor conocimiento financiero tienen una probabilidad más alta de invertir en criptos que el resto: 5,1 puntos porcentuales más en el caso de aquellos que cuentan con mayores competencias financieras. “Estos resultados refuerzan el perfil identificado en el análisis y sugieren que la adopción de criptoactivos se asocia con una mayor disposición a asumir riesgos y con niveles más altos de educación financiera, así como una mayor confianza en sus conocimientos financieros”.
El Banco de España constata que el peso de los criptoactivos en las carteras de los hogares españoles aún sigue siendo reducido, si bien apunta que a medida que el inversor dispone de vehículos de inversión tradicionales, como acciones o fondos de inversión, la opción de que opte por los activos digitales crece. Así, la probabilidad de que un ahorrador con acciones de empresas cotizadas se decante por este mercado es un 4,2% mayor que la de uno que solo tenga cuentas de ahorro. El trabajo, firmado por Luis Miguel Guirola y Carlos Isla Martínez destierra además la creencia de que la inversión en criptoactivos como una alternativa al sistema financiero, que permite el anonimato.
De media, solo el 6% de la población europea tenía criptoactivos en 2023, según datos recabados por la Comisión Europea. Porcentaje que en el caso español bajaría hasta el 4%, similar a Francia o Italia, y lejos del 17% que roza Eslovenia. El dato extraído del barómetro Flash Eurobarómetro, que pregunta sobre productos financieros que posee o ha poseído el encuestado en los dos últimos años, es similar al ya dado a conocer por la CNMV en 2022, un 4,2%, o el 5% citado por otro trabajo de Funcas. Si bien podría haberse incrementado en los últimos años, así un estudio sobre medios de pago del BCE situaba su adopción en 2024 en el 9%.
En aquellos hogares donde sí hay criptoactivos, su presencia está mayoritariamente acotada. Con datos de la encuesta financiera de las familias elaborada por el Banco de España en 2022, en el 80% de los hogares que invierten en activos digitales, estos representan menos del 10% de su riqueza financiera. Si bien, habría un núcleo de 130.000 hogares, que suponen un 0,6% del total, en los que bitcoin y otros activos digitales suponen una parte sustancial de su patrimonio financiero. “Esta alta exposición implica un mayor grado de vulnerabilidad ante fluctuaciones de su valor”, advierte el informe, que aboga por retomar la investigación en un futuro y comprobar si estos ahorradores cambian su perfil de inversión una vez se emancipen del núcleo familiar y afronten nuevas obligaciones o si se mantiene.