De grupo de nicho a fenómeno viral. Con su cuarto disco recién publicado, Geese ha alcanzado un nivel de notoriedad tan inesperado como fascinante, llegando a tocar en Jimmy Kimmel, y no a base de memes precisamente. La música de la banda neoyorquina es tan convulsa como los tiempos que transcurren y la Generación Z lo ha recibido con los brazos abiertos. ‘Taxes’ es la Canción del Día.
Antes de ‘Getting Killed’, a Geese se les conocía en las trincheras de la música alternativa como una joven banda de energía desmedida, giros imprevisibles y gran versatilidad. Ahora, están cerca de convertirse en una figura mítica gracias a un magnético frontman y letrista de tan solo 23 años (Cameron Winter), y a una nueva tanda de canciones que ha invadido el TikTok de toda una generación. Eso sí, su música está hecha para ser disfrutada por todos.
La misma banda que hace un año subía a su canal de YouTube una (interesantísima) versión de ‘Baby’ de Justin Bieber construye en ‘Taxes’ un sonido tan elevador como apocalíptico. Las comparaciones con Radiohead no son un capricho, presentando una compleja percusión y una estructura atípica sostenida totalmente por las letras de Winter, quien ya está siendo comparado con autores tan importantes como Nick Cave, por exagerado que parezca.
«Debería arder en el infierno / Pero no me merezco esto / Nadie se merece esto», canta el frontman en las primeras líneas antes de pedir que le claven en la cruz o de asegurar que a partir de ahora él se encargará de romper su propio corazón. El momento del que todo el mundo habla ocurre justo en el ecuador de la canción, con la aparición de un elevador riff que envuelve toda la mezcla y que ya es uno de los mejores instantes musicales del año.