Dani Carvajal se rompe los ligamentos cruzado y colateral externo, y el tendón poplíteo de la pierna derecha | Fútbol | Deportes

El parte médico confirmó el pesimismo indisimulable que se extendió en el Real Madrid tras ver la lesión de Dani Carvajal en el partido contra el Villarreal. El lateral sufre una rotura del ligamento cruzado anterior, del ligamento colateral externo y del tendón poplíteo en la pierna derecha. Deberá operarse en los próximos días, cuando la zona se desinflame, y el club calcula su tiempo de baja entre los ocho y diez meses. El problema del cruzado, puntualizó la entidad, es el más grave. Ya el propio jugador había anunciado en plena madrugada en sus redes que sufría “una lesión grave de ligamento cruzado”. “Ya estoy deseando empezar la recuperación y regresar como una bestia”, escribió en su nota publicada sobre las 2.30 de la madrugada.

El desgraciado accidente se produjo con el partido ya despachado por el Madrid. En el último minuto del descuento, en una zona casi intrascendente, el lateral, de 32 años, chocó con Yeremy Pino, y las imágenes, sus gestos de dolor y la angustia de sus compañeros dispararon la alarma.

Por otro lado, el Madrid informó que sus servicios médicos desaconsejan el viaje de 12 horas en avión a Brasil de Vinicius debido al problema que sufrió este sábado en la cervical. “Está completamente bloqueado”, aseguró Carlo Ancelotti después de que el atacante se retirara en el minuto 80 visiblemente dolorido. La Canarinha juega el viernes 11 en Chile y miércoles 16 en casa contra Perú, dos duelos clasificatorios para el Mundial 2026.

La de Carvajal se trataría de la cuarta rotura de cruzado en 15 meses en el Madrid. En agosto de 2023 cayeron en apenas tres días Thibaut Courtois y Éder Militão, y en diciembre del mismo año, David Alaba. El austriaco, de 32 años, todavía no ha regresado y, aunque se encuentra en la parte final de la recuperación, la fecha de vuelta es todavía una incógnita y también qué rendimiento será capaz de ofrecer después de una lesión tan grave cuya rehabilitación se está demorando por encima de la media. El pasado mayo, se sometió a una artroscopia.

La lesión del lateral supone otro machetazo a la línea del equipo más castigada por los problemas físicos y con las piezas más justas. La duda es si el club acudirá al mercado de invierno, una opción que ha descartado en los últimos tiempos por más que la precariedad de elementos resultara evidente. Hace 10 meses, cuando la lesión de Alaba dejó la zaga con solo dos centrales puros (Rüdiger y Nacho), la entidad decidió rápido que no ficharía a nadie. Ancelotti tuvo que recurrir al pivote Tchouameni y por ahí pasó hasta Carvajal durante los cuatro meses que transcurrieron hasta el retorno de Militão.

Y este pasado verano, Nacho se marchó a Arabia Saudí, la contratación del joven Leny Yoro se esfumó a última hora y el equipo se quedó con solo dos centrales sanos (Rüdiger y Militão), a la espera de cuándo y cómo retornaría Alaba. Pero tampoco la entidad optó en ese momento por fichar. En el vestuario se quedó Jesús Vallejo, pese a que el cuerpo técnico no confía en él.

Opciones en la plantilla

Con Carvajal en la enfermería, la primera alternativa que le queda al entrenador italiano es Lucas Vázquez, un extremo reconvertido en lateral en el último lustro. En el pasado, también han actuado en esa posición de forma muy esporádica Valverde y Militão. “Lucas Vázquez nos da mucha confianza. En este parón tendremos el tiempo para hablar de este tema [posibles fichajes] teniendo en cuenta que el mercado está cerrado y que no hay muchas opciones. Debemos manejar la plantilla bien y ver, en caso de la ausencia del único lateral derecho que tenemos ahora, que es Lucas Vázquez, quién meter en esta posición”, comentó Ancelotti, cuando todavía no se conocía la comunicación de Carvajal.

El lateral caído, que suma 1.060 minutos entre su club y la selección (el 85% del total posible), se había posicionado en las últimas semanas con mucha contundencia sobre la saturación del calendario y el riesgo de lesiones que supone la acumulación de partidos. Casualmente, igual que su compañero de selección Rodri, que hace una semana se rompió el cruzado durante un City-Arsenal. Esta es la lesión más grave en la carrera de Carvajal. Hace tres y cuatro temporadas, sufrió parones continuos debido a problemas musculares que, tras mucha desesperación, logró resolver con cambios en la dieta. Pero nunca había afrontado un horizonte de varios meses fuera. Su ausencia también la pagará la Roja. No entró en la lista de Luis de la Fuente de este viernes por sanción, pero es uno de los indiscutibles.

El infortunio de Carvajal, cuyo contrato con el Madrid termina en 2025, dejó otro damnificado desde el punto de vista anímico: Yeremy Pino. El jugador del Villarreal, que acaba de volver de una rotura de cruzado sufrida a finales de noviembre de 2023, apareció hace dos semanas en la foto de la rotura de cruzado de Ter Stegen. “Estuve cinco minutos jugando y llorando”, confesó ese día en DAZN. Y este sábado, un choque con el madridista en una acción normal le ha vuelto a golpear.

De camino al 2-0 y antes de que la desgracia rompiera a Carvajal, el Madrid encontró la agitación de Eduardo Camavinga. En su segundo partido tras la lesión, el despliegue del francés en el eje de la medular, en el puesto de Tchouameni (este sábado central), resultó una sacudida para el cansino paso habitual de los blancos por el campo. El mejor tramo que fabricaron los muchachos de Ancelotti empezó con el medio al volante, muy activo para tratar de acelerar la salida de balón y estar al quite.

Por tercer partido consecutivo, Carletto optó por cuatro centrocampistas: Camavinga en el eje, Modric a escena y Rodrygo en el banquillo (el club aseguró que no se había recuperado del todo de las molestias en la espalda). Con la agitación del galo, la salida desde atrás no era el engrudo habitual y, a partir de esa mayor velocidad, el juego de los locales se desarrolló con algo más de brío. No fue un primor, pero la mejora resultó evidente en un momento de muchas dudas.

De todos los centrocampistas puros de la plantilla, la de Camavinga es la única opción que Carletto todavía no ha podido explorar en profundidad para dirigir la salida del balón. El joven sufrió un esguince en la rodilla izquierda el 13 de agosto y hasta el miércoles en Lille no disputó los primeros minutos. “Le falta algo de condición [por la lesión]. Me ha pedido el cambio”, apuntó este sábado el italiano.

Una mano suya fuera de sitio en Francia abrió paso al 1-0 definitivo, aunque en medio del gatillazo general del Madrid la jugada no pasó de la categoría de accidental. Insistió Ancelotti ante el Villarreal, le dio una posición en el pivote y el equipo lo agradeció antes de que la respiración se cortara por Dani Carvajal.

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