Lola Dueñas: Sí, por el éxito que tienen siempre los proyectos de Javier Ambrossi y Javier Calvo.
¿Qué ha supuesto La Mesías para vosotras?
CM: Yo venía de tomarme un tiempo de descanso profesional, estaba muy cansada y pocos proyectos me ilusionaban. La Mesías me devolvió el placer por el trabajo y la felicidad de levantarme cada mañana para ir a rodar .
AR: La Mesías ha supuesto para mi carrera la posibilidad de que me conozcan en otro registro alejado de mí.
A: Un comienzo de lujo en mi posible camino de la interpretación y una experiencia inolvidable.
MG: Un reto inmenso. Una ruptura de mis propias barreras. Un viaje interno y otro laboral de crecimiento brutales.
LD: No es fácil pasar de ellos a otra cosa, se les echa mucho de menos. Cuando una prueba el mejor jamón ya no quiere volver a comer del otro.
¿Qué es lo mejor de Los Javis como directores?
CM: Ellos tiene la virtud del entusiasmo que te contagian de manera implacable. Su dirección de actores es verdaderamente admirable porque además de conseguir lo que necesitan, te hacen sentir poderosa, importante para el total de su proyecto. La sensibilidad, la inteligencia y el amor con el que te guían yo nunca lo había vivido. Es difícil de explicar, pero fácil de entender si eres testigo de ello.
AR: Lo mejor de trabajar con ellos es que son divertidos, son mágicos. Sucede en el set algo verdadero y a mí eso es lo que más me gusta. No pierden perspectiva y, a la vez, es de lo más divertido que hice en mi vida.
A: Lo cómoda que te hacen sentir en todo momento como persona y profesional. Su energía es muy grande y son capaces de transformar los ambientes, como si fuesen hechiceros.
MG: En mi caso es muy especial. Ellos trabajan con tanto detalle, tanta pasión y amor. De una manera muy honda y a la vez divertidísima y alegre. Con un respeto por el actor enorme. En mi caso se une el vínculo personal, me conocen más que nadie el mundo. Ellos saben mejor que yo mis teclas, mis miedos y mis fortalezas.