El perfume favorito de Lady Di, según confesó el Príncipe Harry
Para su boda con Carlos de Inglaterra, la Princesa Diana de Gales eligió el perfume Quelques Fleurs, de Houbigant —cuyo olor coincidía con el de su ramo de novia multifloral—. También se dice que adoraba 24 Faubourg, de Hermés —Paul Burrell, su ex mayordomo, lo menciona en A Royal Duty, un recopilatorio de sus anécdotas con la difunta Princesa de Gales—, Bluebell Eau de Toilette, de Penhaligon’s —su supuesto favorito para el día a día—, Diorissimo, de Dior o Arpège, de Lanvin, pero fue otro aroma muy diferente el que su hijo menor recuerda en sus recientes memorias: First, de Van Cleef & Arpels. Un perfume elegante, discreto y floral con notas de salida de aldehído y jacinto, corazón de rosa, clavel, jazmín, nardo e iris y fondo de musgo de roble, ámbar y sándalo. Este es el (hasta ahora) misterioso olor que el Principe Harry asocia con su madre, y que protagoniza algunas de las 416 páginas de su última (y más controvertida) publicación, su autobiografía.
Y es que bajo el título de Spare, el Duque de Sussex sacó de quicio a la Familia Real Británica el pasado 10 de enero de 2023 relatando a golpe de pluma todo tipo de anécdotas de palacio —algunas más cuestionables que otras, aunque todas motivo de controversia—, pero también recordando más de un momento emotivo con su madre, Lady Di. “Recuerdo la hora de ir a dormir en el Palacio de Kensington, diciendo buenas noches al pie de la escalera, besando su suave cuello, inhalando su perfume, luego tumbándome en la cama en la oscuridad, sintiéndome tan lejos, tan solo, y deseando oír su voz solo una vez más”, plasmaba en sus memorias. Así, el menor de los hermanos no solo revelaba el perfume favorito de la Princesa, también reconocía haberlo usado en terapia para desbloquear recuerdos de su infancia. “Leí en alguna parte que el olfato es nuestro sentido más antiguo, y eso encajaba con lo que experimenté en ese momento: imágenes apareciendo desde lo que parecía la parte más primitiva de mi cerebro”. El poder del perfume en todo su esplendor.
Como fue tanto el revuelo que se formó en el momento, no pude evitar la curiosidad de probarlo poco después en primera persona. Spoiler: he de decir que es uno de los aromas más elegantes que he olido. Es más, desde la propia firma lo definen como ‘una joya sobre la piel’ y, de hecho, su frasco está inspirado en un pendiente como símbolo del vínculo entre una mujer y su fragancia. Aunque, si soy 100% sincera, he de decir que no llegué a comprármela. Y no porque no me hubiese gustado —que me encantó—, más bien porque el peso de llevar el perfume de Lady Di era demasiado para una chica acostumbrada a usar Nenuco. Aún así y aunque solo sea por mera curiosidad, recomiendo mucho (pero que mucho, mucho) probarlo. No todos los días una puede oler la fragancia de la Princesa más querida de todos los tiempos.