Resulta que el desfile de Maison Margiela Artisanal que rompió las redes en enero fue el canto del cisne de John Galliano en la casa. El diseñador se marcha después de 10 años, según anunció en un sentido post en Instagram.
Por ahora, Galliano guarda silencio sobre su próximo paso. «Los rumores… Todo el mundo quiere saber y todo el mundo quiere soñar. Cuando llegue el momento, todo se sabrá», escribió el diseñador, que añadió: «Por ahora, aprovecho este momento para expresar mi inmensa gratitud. Sigo enmendándome y nunca dejaré de soñar«.
Galliano fue nombrado director creativo de Margiela en 2014, su primer alto cargo desde su escandalosa salida de Dior en 2011 (su camino hacia la redención ha quedado recogido en el documental Auge y caída de John Galliano, estrenado en marzo de este año en Amazon Prime). Desde entonces, la firma de culto, amada por los entendidos del arte y de la moda de manos de su evasivo fundador Martin Margiela, alcanzó nuevas cotas bajo su mandato.
El impacto cultural de Galliano y sus creaciones técnicas e imaginativas para Margiela han catapultado a la marca en su conjunto, según declaró a Vogue Business Renzo Rosso, fundador y presidente de OTB, la empresa matriz de Margiela, en una entrevista reciente. OTB se hizo con la propiedad de la marca en 2006. Desde la retirada de su fundador en 2009, la marca fue dirigida por un equipo anónimo (del que formó parte durante un tiempo el actual director creativo de Bottega Veneta, Matthieu Blazy) hasta el nombramiento de Galliano.
OTB no desglosa los ingresos concretos, pero las ventas de Margiela crecieron un 23% en 2023, incluso antes del desfile de enero. Del mismo modo, las ventas crecieron un 24% en el periodo 2021-2022. Un ejemplo del impacto de Galliano es que el Tabi, el icónico zapato de Margiela lanzado originalmente en 1988, se ha convertido en omnipresente en las calles de París, Londres, Nueva York y otras grandes capitales de la moda en los últimos años desde que el diseñador puso la firma en el candelero. El zapato incluso fue objeto de un vídeo viral en TikTok, en el que una mujer contaba como un neoyorquino le robó su par después de una cita, fenómeno del que se hicieron eco Vogue, Dazed y The New York Times. Hay 26,5 millones de publicaciones que mencionan «Tinder tabi thief» en la plataforma.