«Consulta a tu médico si estás tomando algún anticoagulante (por ejemplo, aspirina, warfarina, apixabán), ya que la cúrcuma puede aumentar el riesgo de hemorragia», explica. También señala que tomar cúrcuma con otros suplementos alimenticios que también tienen efectos anticoagulantes, como el jengibre y la vitamina E, puede aumentar aún más el riesgo de hemorragias y hematomas. Además, señala que los estudios han demostrado que la cúrcuma puede empeorar problemas relacionados con la vesícula biliar.
«Quienes padezcan enfermedades de la vesícula biliar, cálculos biliares u obstrucción de los conductos biliares deben evitar este suplemento dietético, ya que puede estimular la liberación de bilis, lo que podría agravar estas afecciones», afirma.
¿Qué medicamentos no son compatibles con la cúrcuma?
Como ya se ha mencionado, los medicamentos y suplementos anticoagulantes pueden interactuar con la cúrcuma. En cuanto a los medicamentos específicos para la piel, el Dr. Khalifian señala que, debido precisamente a estas propiedades anticoagulantes, podría potenciar los efectos de la isotretinoína u otros medicamentos que aumentan la fotosensibilidad y fragilidad de la piel, dando lugar a quemaduras solares, hematomas o una cicatrización más lenta.
«Los efectos antiinflamatorios de la cúrcuma podrían reducir teóricamente la eficacia de tratamientos como el peróxido de benzoilo o los retinoides, que dependen de una inflamación controlada para su acción», explica. «Aunque estas interacciones no son peligrosas, los pacientes deben usar protección solar para contrarrestar cualquier posible fotosensibilidad y comentar los nuevos suplementos con su dermatólogo para garantizar unos resultados óptimos».
¿Es segura la cúrcuma durante el embarazo?
Aunque el consumo ocasional de cúrcuma en las comidas suele considerarse seguro, algunos médicos sugieren que las personas embarazadas o en período de lactancia eviten la cúrcuma y los suplementos de curcumina. Como sugieren nuestros expertos, consulta con tu médico antes de incorporar zumo o suplementos de cúrcuma a tu rutina.
¿En qué momento del día se debe tomar la cúrcuma?
Puede consumirse a lo largo del día. Sin embargo, como señala el Dr. Akhiyat, lo importante es cuidar con qué se combina.
«Como suplemento en solitario, puede consumirse en forma de chupito, zumo, smoothie o comprimido», explica, «pero es importante saber que la curcumina cruda tiene una biodisponibilidad relativamente escasa cuando se consume por vía oral. En otras palabras, cuando se toma exclusivamente por vía oral, no se absorbe mucha cantidad en el tracto digestivo. Combinar pimienta negra (piperina) o grasas (aceites, aguacate, frutos secos) con la cúrcuma puede aumentar la tasa de absorción de la curcumina».
Cómo preparar chupitos de cúrcuma
Históricamente, la raíz de cúrcuma se ha utilizado en elixires para la vitalidad y la belleza en general. Se puede simplemente añadir la raíz a un exprimidor y tomar directamente el líquido fuerte y dorado que se extrae, o añadir un poco de jengibre y zumo de limón a la mezcla, pero cuando se prepara como tónico, es un estimulante perfectamente refrescante para el mediodía. A continuación, encontrarás la magnífica receta de tónico de cúrcuma de El Rey, el querido café vegetariano, hoy cerrado, de Nueva York. Consejo experto: es habitual añadir una cucharadita de aceite de coco o ghee (mantequilla clarificada, rica en omega-3) para ayudar a activar los compuestos naturales del tónico y facilitar su absorción en el organismo. La cantidad de cúrcuma que utilices en esta receta depende de lo fuerte que lo prefieras, pero nuestra recomendación, ¡cuanto más fuerte, mejor!