Agentes de la Policía Nacional han detenido este martes a Kike Salas, jugador del Sevilla Fútbol Club, por provocar presuntamente que los árbitros le mostraran tarjetas amarillas en los últimos partidos que disputó con su equipo la temporada pasada con el objetivo de que, al menos, dos personas de su entorno ganaran dinero en apuestas deportivas. Un juzgado de Morón de la Frontera (Sevilla) investiga al futbolista por un presunto delito de estafa, según adelantó El Confidencial y han confirmado a EL PAÍS fuentes cercanas a la investigación. El jugador, tras negarse a declarar ante la Policía, ha quedado en libertad a la espera de ser citado por el juez para ser interrogado como imputado.
Estas mismas fuentes apuntan que el deportista ―que puede ver gravemente afectada su carrera deportiva por este arresto― presuntamente no obtuvo ningún rédito económico con el fraude y que su única intención era supuestamente que dos amigos, también detenidos, ganaran dinero con las apuestas. Las pesquisas, que corren a cargo del Centro Nacional Policial para la Integridad en el Deporte y las Apuestas (Cenpida, adscrito a la Unidad Central de Delincuencia Especializada y Violenta), apuntan a que estos amigos realizaron alrededor de 30 apuestas fraudulentas en seis establecimientos de Morón de la Frontera y obtuvieron ganancias en un mes de cerca de 10.000 euros, cifra que podría incrementarse según avance la investigación.
“El club no tenía constancia de este hecho. La policía se ha llevado esta mañana al jugador a declarar y estamos a la espera de acontecimientos”, han afirmado a este diario fuentes del Sevilla FC después de que los agentes arrestasen al deportista a la conclusión del entrenamiento de la primera plantilla. En un comunicado posterior, el club andaluz expresaba su respeto a los procedimientos judiciales y a la presunción de inocencia del jugador. “El Sevilla FC, tras los hechos acaecidos este martes en relación a nuestro jugador Kike Salas, quiere mostrar su total respeto a los procedimientos judiciales. Igualmente, quiere destacar su respeto al principio de presunción de inocencia de nuestro futbolista”, se destaca. “Naturalmente, el Sevilla FC condena cualquier conducta fraudulenta en el mundo del deporte y en particular las que puedan afectar a la integridad de la competición”, añade el Sevilla
En dependencias policiales, Salas, defensa canterano de 22 años y recientemente renovado hasta 2029, se acogió a su derecho de no declarar, tras lo que quedó en libertad a la espera de que el juez lo llame. Antes tuvo que entregar el teléfono móvil para que fuese clonado y que los investigadores accedan a su contenido. Tras ello, regresó a su domicilio. La investigación que ha llevado a su arresto se inició a finales de la temporada pasada después de que se presentara una denuncia, según detallan fuentes policiales. LaLiga, que desconocía la existencia de las pesquisas hasta este martes, ya ha anunciado que se personará como acusación en el proceso.
El defensa está acusado de ponerse de acuerdo con dos amigos para forzar que le mostrase tarjetas amarillas en encuentros oficiales de LaLiga y que estos pudieran hacer apuestas fraudulentas. Los operadores de juego permiten apostar a múltiples facetas de los partidos más allá del resultado final o al descanso. Así, se puede jugar a qué equipo va a marcar el primer gol, el número de córneres que se van a lanzar, si habrá penaltis o quién recibirá una tarjeta, como es presuntamente el caso de Salas.
En este caso, el fraude se concentró en la fase final de la pasada temporada de Primera División. En concreto, en las últimas ocho jornadas de la pasada temporada (entre la jornada 31 y la 38), en las que el jugador vio siete tarjetas amarillas (casi a amarilla por partido). Las últimas jornadas de la temporada son los momentos que los expertos policiales consideran más proclives a los amaños, ya que muchos equipos ya no se juegan nada y existe el riesgo de que futbolistas se presten a estos fraudes.
El Sevilla FC, después de rondar puestos de descenso a lo largo de la temporada, llegó al último tramo del campeonato con la permanencia casi asegurada tras derrotar el 30 de marzo al Getafe FC (0-1). Tras ello, el club andaluz perdió de manera consecutiva en las últimas cuatro jornadas de Liga ante Villareal CF, Cádiz CF, Athletic de Bilbao y Barcelona FC. En todos estos partidos fue amonestado Salas, que vio un total de 10 tarjetas amarillas en el pasado curso 2023-24, siete en ese tramo final. De estas, cuatro lo fueron en los instantes finales del partido.
Kike Salas venía actuando de lateral izquierdo en el Sevilla, aunque se desenvuelve generalmente como defensa central por los problemas que tiene el equipo en esa posición. El conjunto sevillista juega el próximo sábado a las 14.00 horas contra el Girona y toda apunta a que el defensa no estará en el duelo contra los catalanes. Salas debutó en la temporada 2022-2023 con el primer equipo del Sevilla y luego fue cedido al Tenerife en la segunda vuelta de ese curso. Regresó al equipo sevillista la temporada pasada, en la que jugó un total de 25 partidos. En la actual campaña ha disputado 16 encuentros entre la Liga y la Copa.
