Si hablamos de la piel, para conseguir ese acabado y resistir al devenir de las horas (y las emociones), ha sido primordial la preparación de la piel con básicos de la casa (el mítico Tonique Confort y el serum Génifique, entre ellos) y el uso de una base de maquillaje hidratante y luminosa. Y si nos centramos en la mirada –esa mirada– la actriz se ha decantado por el gran color de la temporada: el berenjena, un tono marrón rojizo que, tal y como explican los maquilladores de la maison, dulcificada la mirada a la vez que la potencia, y más cuando se tiene un tono de ojos verdoso como el de Aitana. Para conseguir ese efecto, basta con usar un lápiz marrón difuminado y luego estructurar la mirada con sombras de ojos, en su caso Hypnôse Palette en el tono 09, haciendo uso de la regla que no falla: sombra clara en el párpado móvil y oscura en la cuenta del ojo.
Andrés García Luján
