Blush combo: la técnica para aplicar el colorete este verano
Cada verano un producto concreto de maquillaje protagoniza looks, tendencias y estéticas que todas ansiamos recrear por ese “efecto buena cara” que tan favorecedor resulta y que combina a la perfección con la calidez y el sol de los meses veraniegos. Un imprescindible, también, de trends tan populares como el island girl makeup, el tomato girl makeup o su versión strawberry. También el pomegranate makeup, que reversionaba el famoso efecto sunkissed durante el pasado verano de 2024, pero inspirándose en las tonalidades de una granada. Este 2025 es el turno de las cherry girls, pero el denominador común de todos todos estos acabados continúa siendo el mismo: el colorete.
“Creo que buscamos vernos con mejor cara y el colorete lo consigue al instante: aporta frescura, luz y ese toque saludable que cambia el rostro”, nos cuenta la maquilladora profesional Yael Maquieira sobre el furor por este producto. “Los tutoriales en redes han hecho que más gente se anime a usarlo y a jugar con tonos y texturas”, añade. Entre los numerosos tips que se han viralizado en redes sociales, hay una técnica que promete ser la indispensable de este verano en materia de coloretes. Probablemente tengas ya tu lip combo favorito, ¿pero tienes ya tu blush combo perfecto?
¿En qué consiste el blush combo?
Aunque ha ganado popularidad a través del concepto ‘blush combo’, se trata de una técnica que profesionales y expertos llevan recomendando años. “Consiste en aplicar primero un colorete en crema y luego uno en polvo para sellar”, explica Maquieira. Combinar texturas diferentes, más allá de potenciar la pigmentación y añadir más rubor al rostro —porque, sí, en cuanto a colorete, nunca es suficiente y el miedo a excederse en capas se esfumó hace ya unos cuantos años—, prolonga su duración, según nos confiesa la experta.
“El colorete en crema da jugosidad y ese efecto de piel viva, pero no siempre dura todo lo que nos gustaría”, recuerda Yael. “El polvo, en cambio, fija y prolonga el color, aunque a veces puede marcar más si se usa solo”, añade por otro lado. Combinar texturas y colores no solo nos permite experimentar y explorar esa creatividad tan presente en el mundo del maquillaje, también “consigue que el rubor dure más y que el acabado sea más fresco, natural y favorecedor”, asegura la maquilladora profesional.
Los pasos para aplicar el blush combo, según Yael Maquieira
- Hidratar bien la piel. “Sin una buena hidratación el producto no se difumina bien ni aguanta”, insiste.
- Aplicar primero el colorete en crema. “Lo suelo aplicar cogiendo un poco con el dedo, después lo deposito en el dorso de la mano y desde ahí lo tomo con el pincel, a toques, para no arrastrar la base”, recomienda.
- Sellar con el colorete en polvo. “Para hacerlo, utilizo una brocha y cojo producto solo con un lado. Aplico con ese lado y difumino con el otro, que está limpio, para evitar excesos”, especifica. “Es un truco para controlar mejor la cantidad y el acabado, además es más natural”, asegura.
Además, la profesional nos cuenta la clave de todo este proceso: “Trabajar bien cada capa y aplicar poca cantidad, construyendo el color poco a poco”. En caso de optar por tintes para dar rubor a las mejillas, recomienda combinarlo con otro colorete en crema para crear este blush combo. “Para esta fusión, recomiendo aplicarla con pincel para conseguir un acabado más controlado”, añade.
Trucos para encontrar el combo de colorete perfecto
El blush combo permite la posibilidad de combinar cualquier tonalidad de colorete que deseemos: colores rosados, más melocotón o incluso más marrones. “Me encanta combinar tonos distintos, uno en crema y otro en polvo que casen bien”, cuenta la Maquieira. “Siempre recomiendo jugar con el color según el día o el look. Así se consiguen rubores más personalizados y con mucha más vida”, asegura.
Las combinaciones son infinitas pero, ¿existe una regla que nos guíe a la hora de saber qué tonos de colorete mezclar y cuáles no? La maquilladora responde: “En general, suelo evitar los tonos terracota, porque tienden a apagar la piel y no reflejan ese rubor natural que buscamos”. Pero en materia de coloretes, las posibilidades no se acaban y nos recomienda otras. “Me encanta mezclar tonos que se complementen y den vida al rostro, como, por ejemplo, un burdeos intenso con un rosa bebé, porque equilibran fuerza y frescura”, explica. “Esta mezcla ayuda a quienes suelen usar tonos cálidos a atreverse con fríos, que rejuvenecen y den mejor cara”, cuenta. “También me gusta mucho mezclar colores anaranjados con rosados o incluso jugar con rosas más fríos y lilas suaves, que aportan mucha luz y vitalidad”, cocnluye.