La actriz estrena el 30 de octubre, el día de su cumpleaños, la serie Yo adicto, la adaptación a la pantalla de la novela del mismo título de Javi Giner. Un pequeño rol en esta producción que se lanza fuera de competición en el Festival de San Sebastián y que cuenta el viaje a los infiernos de las drogas de un jefe de prensa. “Tengo un papel muy pequeñito porque todo se centra en la figura de Oriol Pla, que hace de Javi, pero hicimos un trabajo conjunto de ensayos con el propio Javi”, cuenta. “Hubo algo bonito en el proceso. Es como en La estrella azul, tengo poquito, pero es superintenso. Creo que es una serie que va a dar mucho que hablar”. Y, después, llegará El jardinero, su segunda serie de Netflix, esta vez con papel protagónico. Comparte escenas con Álvaro Rico y Cecilia Suárez. “Es un thriller con toques románticos y ha sido un sueño rodarlo. Una historia mezcla dos géneros que nunca juntarías: asesinatos y romance. No he visto nada, no sé en qué ha quedado, pero tengo muy buenas sensaciones. Hago un personaje muy guay con un arco interesante y para mí ha supuesto un paso en mi carrera necesario”, concede.
Es más que posible que con estos dos proyectos, Catalina Sopelana multiplique su presencia en alfombras rojas y eventos. Por el momento, estará en Donosti presentando la mencionada serie de Javi Giner con el resto del equipo. “Estoy aprendiendo a estar cómoda en las alfombras rojas, a definir mi estilo. Es cierto que no me siento tremendamente a gusto en el momento photocall y alfombra, pero soy capaz de ver las oportunidades que eso trae”, cuenta. “Cuando trabajo con mi estilista, caigo en que estoy accediendo a marcas, fotógrafos y prendas increíbles, y eso sí soy capaz de disfrutarlo. En el momento en sí, me disocio un poco, pero también pienso que es único y una nunca sabe cuando se va a volver a dar”.
