En el desfile de Moschino de primavera-verano 2026, Adrian Appiolaza exploró ese “algo” que se esconde en la “nada”
La definición de niènte, en el diccionario Treccani, es «nada», «bagatela, cosa de poca o ninguna importancia». «Niente» es la palabra que Franco Moschino quiso ensalzar en una camiseta de su colección de primavera-verano 1992: en las paredes de su estudio guardaba todas las pruebas impresas que se hicieron pruebas para elegir el tamaño de la serigrafía. Y esa camiseta, no solo como objeto sino como concepto, ha servido de punto de partida para la colección de primavera-verano 2026 de Moschino. Así, en la Semana de la Moda de Milán, Adrian Appiolaza la transformó en un descubrimiento de la maravilla que habita lo ordinario, en una búsqueda del ‘algo’ que se esconde en lo que parece ser nada. Bautizada precisamente así, Niente, la colección gira en torno al reciclaje como principio fundamental. En ella, reutilizar significa «repensar, recalibrar, reevaluar», y «reimaginar es revitalizar, reconceptualizar, redefinir», como se pudo leer en las notas del desfile.
El desfile de Moschino buscó hacer moda a partir de otra moda. Un ejercicio de elevación de la materia prima, una sublimación de lo que es por definición pobre: arpillera de yute, cuerda, madera, cordones, nudos, hojas de periódico. Macetas, cinta adhesiva, retales de tela, bandejas de fruta, camisas en desuso o trapos viejos, cajas de cartón o paquetes de regalo: todo lo transformable cambia de forma. El concepto de Adrian Appiolaza hacía referencia al planteamiento anárquico e irónico del Arte Povera como acto de rebelión contra la modernidad. A la vez, pertenece al legado y la filosofía de Franco Moschino como reflexión sobre los valores y el significado del propio lujo.
El desfile de Moschino en 5 looks que transforman la ‘nada’ en fantasía
1. La cinta, en una falda de organza
2. El vestido de yute
3. El volumen lúdico del trench
4. Camisetas viejas o camisas olvidadas transformadas en una falda de trapos
5. Mil hojas de periódico
Este artículo se publicó originalmente en Vogue.it