Cuando pensamos en un look blanco de pies a cabeza, los ingredientes que entran en juego son más bien tejidos como el algodón o la viscosa, en prendas ligeras como un vestido o una falda combinada con una camiseta de manga corta. Sí, se trata de un color que por su contexto llama al verano, pero aquí hemos recordado en varias ocasiones todas las posibilidades que tiene de cara a las bajas temperaturas.
En su última aparición, la reina Letizia ha puesto de manifiesto que unas blancas navidades también pueden pasar por un riguroso estilismo de este tono. Ha sido en su llegada a Roma, en la visita de Estado de los Reyes en Italia. Ayer pudimos ver a la monarca bajar la escalinata del avión con unos pantalones blancos de pinzas y un abrigo tipo batín, con un paño en un tono hueso. Para protegerse del frío italiano, una bufanda, que llevó cruzada al pecho.
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Al quitarse el abrigo, en un evento que tuvieron en el barrio de Trastevere, pudimos ver que la reina Letizia se había decantado por un traje de chaqueta níveo, cuyas solapas y botones satinados aportaban un juego de texturas sutil a un color tan sobrio. Como broche final, la soberana lo complementó con un bolso y unos tacones bajos de Magrit dorados, un tono metalizado de lo más inspirador para poner en práctica estas fiestas. Los pendientes, de nuevo, fueron valencianos: el modelo Nanuk de la firma Sure Jewels.
