Mermado por la expulsión de Barrios a los seis minutos y tocado por el penalti que puso en ventaja al Celta en el ecuador del segundo tiempo, el Atlético no pudo coger el liderato que le brindaba el empate del Madrid en El Sadar, pero otro ejercicio gremial de resistencia y fe le dio para consumar las tablas con un buen gol de Sorloth.
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Jan Oblak, José María Giménez, Marcos Llorente, Javi Galán (Reinildo, min. 58), Robin Le Normand, Rodrigo De Paul (Alexander Sørloth, min. 77), Giuliano Simeone (Conor Gallagher, min. 77), Pablo Barrios, Samuel Lino (Koke, min. 9), Julián Alvarez y Antoine Griezmann (Ángel Correa, min. 77)
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Vicente Guaita, Carl Starfelt, Carlos Domínguez (Óscar Mingueza, min. 36), Javi Rodríguez (Borja Iglesias, min. 45), Hugo Sotelo, Fran Beltrán (Iker Losada, min. 45), Sergio Carreira, Marcos Alonso, Fernando López (Iago Aspas, min. 61), Pablo Durán y Williot Swedberg (Ilaix Moriba, min. 71)
Goles
0-1 min. 67: Aspas. 1-1 min. 80: Sörloth
Arbitro Juan Martínez Munuera
Tarjetas amarillas
Carlos Domínguez (min. 30), Pablo Durán (min. 46), De Paul (min. 64), Le Normand (min. 66), Giménez (min. 67), Marcos Alonso (min. 71), Iker Losada (min. 79), Borja Iglesias (min. 91)
Tarjetas rojas
Pablo Barrios Rivas (min. 6)
La fogosidad de Barrios precipitó su segunda expulsión en menos de un mes. Ya vio una roja similar y dejó a su equipo con diez contra el Bayer Leverkusen por ir a una disputa con el pie levantado. Esta vez, Barrios impactó contra la tibia de Pablo Durán después de controlar el balón con el pecho y tardar más de la cuenta en soltarlo. Errores de juventud que debe corregir para terminar de pulirse. Simeone operó rápido. Metió a Koke y sentó a Lino, aunque esto supusiera perder la simetría que busca con la profundidad del brasileño. Prefirió recomponer una línea de cuatro centrocampistas con dos pivotes, Griezmann a la izquierda y Julián Alvarez como único punta. La solución apuntaba a tratar de disimular la inferioridad numérica, que solo la percibiera el Celta con el aislamiento del atacante argentino. Logró el Atlético ese objetivo. Por momentos, incluso las carreras de Giuliano para presionar al portero animaron al resto para instalarse en campo contrario. Un par de jugadas de estrategia mal rematadas alteraron a Guaita.
No pudo sacar excesivo provecho el Celta de su superioridad numérica. Una vez que rebasaba con facilidad la línea del solitario Julián Alvarez se topaba con esas dos líneas de cuatro que le costó rebasar. Giráldez quiso evitar que el Atlético buscara la expulsión de Domínguez y le reemplazó por Mingueza a la media hora de juego cuando este vio la amarilla. Extrañó que un equipo que funciona mucho buscando las superioridades le costara tanto encontrar al jugador libre en ataque. Entre Fran Beltrán y Hugo Sotelo movían al equipo con más academia que intenciones afiladas. Eso le dio para descubrir un par de rendijas que sí apuraron a Oblak. Una fue un zambombazo sin ángulo de Marcos Alonso que el esloveno repelió y otra un globo por encima de la defensa que Pablo Durán no engatilló bien. Se apreciaba respeto en el Celta de ser rematado en alguna contra, como sucedió en el partido de Vigo.
El Atlético logró alcanzar el intermedio con el marcador empatado, un mal menor por las tablas del Madrid en Pamplona. Simeone mantuvo el equipo y Giráldez empezó a meterle más intención y oficio con Borja Iglesias primero y con Iago Aspas después. No varió mucho el escenario. El Atlético seguía conteniendo al Celta y trataba de desplegarse con la velocidad de Giuliano o Llorente. Este acompañó bien una contra de De Paul, pero la culminó con un disparo centrado.
Poco a poco, el desgaste físico del Atlético le dio más control al Celta. Lo vio Simeone, que sentó a Galán para blindar más ese flanco con Reinildo. El Celta se puso en ventaja con un penalti que discutieron los rojiblancos. Le Normand pisó a Borja Iglesias y el colegiado señaló los once metros. Le Normand pisó a Borja Iglesias y el colegiado señaló los once metros bajo esa normano escrita y tan discutida de que cuialquier pisotón en el área es penalti. Aspas engañó a Oblak con un toque ajustado a media altura. Tenía veinte minutos largos el Atlético para al menos tratar de empatar. Simeone se descamisó quitando a Griezmann, De Paul y Giuliano y jugársela con Correa, Gallagher y Sorloth. Correa generó alguna escaramuza de las suyas antes de que Sorloth porfiara un balón largo con los centrales del Celta. El noruego salió ganador y se sacó un disparo desde la frontal del área que sorprendió a Guaita. El tanto suponía un punto meritorio, que le sirvió al Atlético para mantener el de diferencia que le saca el Madrid. El Barça tiene la palabra sobre el liderato el lunes ante el Rayo.
