Alta costura de primavera-verano 2025 de Christian Dior: la artista Rithika Merchant ambienta el desfile con una obra inmersiva compuesta por nueve cuadros
«Creo que el elemento principal de esta colección es la juventud y, sobre todo, la vuelta a las tendencias olvidadas, es decir, la sencillez, la naturalidad y la suavidad». Con esta frase, un jovencísimo Yves Saint Laurent, recién nombrado director creativo de la casa de moda Christian Dior, describió su colección de debut, Trapèze. La línea se presentó en 1958 y encarnaba todos los valores de las chicas de los años sesenta, como la liberación del cuerpo y el espíritu de emancipación. Sus creaciones audaces se inspiraron, entre otras cosas, en la Generación Beat. Hoy, en el desfile de alta costura de primavera-verano 2025 de Christian Dior, Maria Grazia Chiuri volvió a ese a ese momento de la historia para inspirarse y mezclar lúdicamente el pasado y el presente en prendas maravillosas con las que una mujer puede ser una cosa y todo lo contrario. Puede ser una mujer flor, bien envuelta en una capa de pétalos, bien descubierta con un minivestido de apretadas corolas en el busto que estalla en una ligera crinolina; o una mujer pájaro, gracias a un tocado con cresta punk que se dispara hacia el cielo.
«En esta colección, me fascinó la línea Trapèze de Yves Saint Laurent porque se basa en vestidos de niña, pero con una silueta mucho más construida. Combina elementos que no forman parte de mi lenguaje habitual y que quería reelaborar con un enfoque completamente nuevo. Creo que hay que mirar a la infancia porque es una parte muy formativa de nuestra existencia«, explicó la diseñadora. Entre las prendas más destacadas, sorprendieron los culottes de tul y encaje.