Pocas veces un nuevo centro comercial con escaso tiempo de vida trata de salvar sus problemas financieros mientras mejora su operativa. El dueño de Oasiz, el gran complejo de tiendas ubicado cerca del aeropuerto de Barajas en Madrid, va a solicitar al juzgado una prórroga en el preconcurso de acreedores de otros tres meses, después de que en junio se abriese esa fase preconcursal, señalan fuentes cercanas al proceso a Cinco Días.
El dueño de Oasiz es la compañía Carlotta Iberia. El principal accionista de esta empresa es Cale Street Investment, que tomó el control de la sociedad como principal acreedor con garantía hipotecaria del centro. Fuentes cercanas al proceso indican que la empresa, con el apoyo expreso de más del 50% del pasivo que representan los acreedores y el informe favorable emitido por Lexaudit Concursal, la firma especializada en reestructuraciones designada por el juzgado, ha solicitado de la ampliación de tres meses en el preconcurso de acreedores. “Se trata de una medida acorde a la legalidad e imprescindible para posibilitar la conclusión de las negociaciones y avanzar así hacia un nuevo plan de reestructuración que dé repuesta a la situación actual”, señalan esas fuentes.
Este centro inaugurado en 2021, ubicado junto a la autovía A-2 y en el término municipal de Torrejón de Ardoz, fue impulsado y promovido por Compagnie de Phalsbourg, a través de la filial española Compañía de Phalsbourg de esta inmobiliaria francesa creada en 1989 por Phillippe Journo. Para afrontar la promoción del complejo, constituyó la empresa Carlotta Iberia, en la que también invirtió Alcadasorg, un family office galo.
Sin embargo, el negocio no dio lo suficiente como para devolver la deuda al principal acreedor, el fondo Cale Street, que inicialmente puso 95 millones para la construcción. El problema para los promotores del centro ha sido que, desde su apertura en 2021, no ha funcionado como debería, con una baja ocupación de tiendas y de afluencias de clientes, ante la competencia del más consolidado Parque Corredor.
La filial española del promotor francés, Compañía de Phalsbourg, entró recientemente en liquidación, después de perder el control de Carlotta Iberia. La propia Carlotta Iberia logró el aval judicial a su plan de reestructuración el pasado verano con el que el Cale Street pasó a ostentar el control de la empresa dueña del centro comercial.
Tras esta reestructuración, Cale Street posee una acción de oro, del 75% de los derechos de voto de la sociedad, mientras que Compañía de Phalsbourg y Alcadasorg mantienen el 25% restante de los derechos de voto y el 99,8% de los derechos económicos.
La deuda total de la compañía asciende a 294,6 millones de euros, y actualmente, 134,8 millones de la deuda de Carlotta corresponde a Cale (el único que tiene garantía hipotecaria) y 130,2 millones a Compañía de Phalsbourg y Alcadasorg (por préstamos intragrupo).
En junio, Carlotta convocó junta de accionistas, donde están presentes Cale Street, Compañía de Phalsbourg y Alcadasorg. La propuesta de los gestores pasaba por convertir la deuda en préstamos participativos para sortear la situación de disolución de la compañía. Sin embargo, no se logró el acuerdo.
Tras el rechazo de Compañía de Phalsbourg y Alcadasorg a esos planes, el consejo de administración aprobó pedir el preconcurso. La idea de los gestores es negociar con los acreedores un nuevo plan de subsistencia, pero el plazo de tres meses ha expirado sin avances y por eso solicitan ahora una prórroga. Uno de los hitos que debe llegar para que avance esas conversaciones es un informe de valoración del negocio.
La idea de Cale Street y de los gestores del centro, indican las fuentes consultadas, es seguir mejorando las afluencias de clientes y ocupación de los espacios comerciales de Oasiz y en el que están empleadas centenares de personas. De hecho, buscan una estabilización y que el inmueble gane valor, para poder afrontar en un futuro una venta con mejores perspectivas.
En los últimos meses, el centro comercial ha ganado en nuevos inquilinos y en la actualidad la ocupación llega al 78,5%, tras la gestión encargada por Carlotta a los especialistas Eurofund y Savills. En junio, Oasiz contaba con 81 inquilinos, frente a los 70 que había en marzo de 2024.
El centro es uno de los mayores de la Comunidad de Madrid, con 90.000 metros cuadrados de superficie bruta alquilable, 250.000 m2 de superficie total y 3.600 plazas de aparcamiento. Sus principales locales están alquilados a Lidl, Fnac, Nike, Pull & Bear, Mango, Action y Adidas, y sobre todo una potente oferta de ocio como cines (Cinesa) y zonas como circuito de motocross, fitness, camas elásticas, juegos deportivos interactivos, gaming, bolera y karting, entre otras.
El promotor francés
Cinco Días adelantó en mayo que la filial española Compañía de Phalsbourg, que tiene a FTI & Partners Corporate Recovery Spain como administrador concursal, entró en liquidación, tras acordarlo el Juzgado Mercantil número 14 el 26 de mayo. Esa decisión se tomó después de entender que el convenio no iba a conseguir las adhesiones necesarias de los acreedores.
La filial española del grupo promotor francés se encontraba en concurso de acreedores desde finales del año pasado, después de que dicho juzgado no diera luz verde al plan de reestructuración presentado, a diferencia de lo ocurrido unos meses antes con la propuesta de Carlotta Iberia.
El plan de Carlotta Iberia salió adelante después de que Cale Street inyectara 20 millones para asegurar la viabilidad a corto y medio plazo del centro, por lo que Compañía de Phalsbourg perdió el mando en la toma de decisiones.
Asimismo, los nuevos gestores del centro acordaron el pago de otras deudas que quedaron fuera de la reestructuración como impuestos pendientes al Ayuntamiento de Torrejón y los incentivos no abonados a los inquilinos existentes en ese momento, así como para financiar el efectivo necesario para la incorporación de nuevos inquilinos.
