El hábito placentero de verano que reduce el estrés un 70% en seis minutos, según una psicóloga

El hábito placentero de verano que reduce el estrés: leer al llegar a casa

El verano, la jornada intensiva, las vacaciones… todo ese contexto de dolce far niente (aunque solo sea a medias si no se está de vacaciones) invita a leer más. Es un hecho que confirman las editoriales, los libreros y cualquiera mortal que aproveche las tardes de piscina para leer algo más de lo normal. De hecho, una de las últimas tendencias es la incorporación de bibliotecas en hoteles de lujo con estudiadísimas selecciones de libros para así añadir un paso más a la vocación holística del destino elegido.

Está claro que leer es salud, pero no es necesario viajar lejos para devorar un libro o esperar al momento de irse a la cama para avanzar unas páginas. Leer al llegar a casa –algo que suele ser más fácil de hacer en verano– es uno de los mejores hábitos que existen para desacelerar el ritmo frenético de un cerebro hiperestimulado durante la jornada laboral (y la vida real). Y para bajar los elevados niveles de cortisol que estamos tan empeñados en reducir. Así lo confirma a esta cabecera la psicóloga Marta Calderero, directora de Personalife.com y experta también en psicología audiovisual y escénica. “Introducir la lectura como un pequeño ritual nada más llegar a casa tras un día intenso es una de las maneras más suaves y efectivas de calmar la mente. En varios estudios psicológicos se comprobó que leer apenas seis minutos reduce el estrés en casi un 70 %. Este efecto tan relajante se produce porque, durante la lectura, nuestro cuerpo pasa de un ‘modo alerta’ que dispara la liberación de cortisol, la hormona del estrés, hacia un estado de mayor relajación, en el que la frecuencia cardíaca se modera y los músculos se aflojan. Sabiendo esto, dedicar un ratito a la lectura al llegar a casa se convierte en la mejor medicina porque te ayuda a bajar revoluciones y a disfrutar de una tarde más tranquila y reparadora”, explica.

Leer como herramienta de longevidad (y para trabajar la inteligencia emocional)

Las bondades de la lectura son muchas, pero por ceñirnos al terreno puramente físico, leer de forma habitual es otra forma de restar años a la edad biológica (la que tiene nuestro organismo realmente y no la que marca nuestro DNI). Un estudio de la Escuela de Salud de la Universidad de Yale confirmó que las personas que dedican tres horas y media a la semana a la lectura son menos propensas a morir (un 17% menos). Lo estimaron después de hacer un seguimiento de 12 años a estos lectores.

Pero si vamos más allá, convertir las lecturas de verano en hábito durante todo el año, también ayuda a desarrollar la inteligencia emocional. “Sumergirnos, aunque sea solo un ratito, en otras historias vitales a través de un libro es un verdadero regalo de bienestar. Numerosos estudios psicológicos demuestran que quienes leen con regularidad desarrollan una mayor empatía, porque potencian su capacidad para comprender cómo se sienten y piensan los demás”, explica Calderero. Y aunque no siempre se puede leer en un entorno idílico (y no pasa nada) conviene saber que si esta lectura se hace en un escenario relajado (y si puede ser idílico “activamos el sistema nervioso parasimpático, lo que ayuda a reducir el estrés y a mejorar nuestro estado de ánimo”, sentencia Calderero.

Ver fuente

Farándula y Moda

Entrada siguiente

NetEnt Application unique roulette video game

Lun Jul 14 , 2025
Comparte en tus redes sociales Content Inside bets Western Roulette Games Regulations Set of casinos on the internet: find a very good sites Cellular & Programs Naturally, they don’t performs, since the gambling establishment constantly features a mathematical border more than your. People attempt to continuously winnings during the roulette […]

Puede que te guste