Recién salida de encabezar el festival de música Coachella el mes pasado, Lana Del Rey ha hecho un regreso triunfal a la Met Gala 2024, marcando su primera asistencia desde 2018. Y, como de costumbre, la cantante lució un look etéreo y oscuro pero romántico: triunfó sobre las famosas escaleras del Met con un diseño personalizado de Seán McGirr, actual director creativo de Alexander McQueen.
El llamativo estilismo de Del Rey hacía referencia a una imagen de archivo de Alexander McQueen de su colección ready-to-wear de otoño de 2006; McGirr quería celebrar el savoir-faire del atelier de una forma nueva y contemporánea. El resultado fue un vestido encorsetado de seda, georgette doble y tul, todo bordado a mano con ramas de espino martilladas con cascabeles de bronce, inspiradas en la pátina y la forma de las esculturas del artista suizo Alberto Giacometti. Para un acabado espectacular, McGirr creó un tocado especial para Del Rey, utilizando ramas naturales de espino y cubriéndolas con un velo de tul transparente. Del Rey también lució un bolso Drop de metal bronce adornado con un detalle de reloj.
Esta noche es la tercera vez que Lana Del Rey asiste a la Met Gala. En 2018, para el tema Heavenly Bodies, la cantante ofreció uno de los mejores momentos de moda de la noche con un look personalizado de Gucci, llegando a la alfombra junto a Jaret Leto. El diseño presentaba un vestido color crema con detalles dorados, incluida una placa en el pecho en forma de corazón sagrado (perforada con pequeñas dagas) y un tocado azul ombré con alas. En 2012, Del Rey llegó a la gala con un elegante look de Altuzarra; su vestido plateado metalizado, con escote corazón, iba acompañado de una espectacular capa negra. Esta noche, con su look centrado en la naturaleza, la cantante nos ha vuelto a sorprender.
