El tartán, o ese estampado de cuadros cuyos orígenes se remontan a principios del siglo XVI en Escocia que vuelve todos los inviernos
Este estampado de cuadros o tartán tiene sus raíces en el siglo XVI en Escocia y que fue adoptado por los punks en la década de 1970 y se ha mantenido como un elemento que aparece y desaparece entre las modas. El estampado ha sido reinterpretado y rediseñado en innumerables ocasiones y puede evocar estilos aparentemente opuestos como el grunge y la tendencia preppy convirtiéndose en el favorito de las más rebeldes y de las más sofisticadas.
Las casas de moda más importantes también lo han incluido en sus propuestas para esta temporada otoño-invierno 2024/2025. Burberry hacía alarde de su identidad de marca e incorporaba este estampado a su colección de otoño-invierno 2024/2025 de diferentes maneras. Los vestidos en tejido de tweed destacaban por el tartán en los marrones particulares de la marca que eran combinados con cazadoras en efecto piel. También aparecía el tartán en las prendas de abrigo diseñadas por el director creativo de la casa británica, Daniel Lee, como las bufandas o en las faldas con el fondo rojo, al más puro estilo punky.
Burberry otoño-invierno 2024/2025
Burberry otoño-invierno 2024/2025
Por su parte, Rabanne y R13 también jugaban con este print incorporándolo a piezas como pantalones, camisas y sobrecamisas. El grunge aparecía de la forma más sofisticada en las piezas de Rabanne en las que ese aspecto desaliñado que caracteriza a esta inclinación se materializaba en forma de cárdigan oversize. La rebeldía se mostraban en los estilismos de R13 que combinaba la camisa con camisetas estampadas al más puro estilo punky –Vivienne Westwood aprobaría sin duda–
Rabanne otoño-invierno 2024/2025
R13 otoño-invierno 2024/2025
Entre lo ‘preppy’ y lo ‘punky’: el estilismo de Jenna Ortega
Unos mocasines con calcetines y una americana con una falda de tablas. Si te lo describen tal cual puede que en tu cabeza se dibuje una imagen de una niña con el uniforme escolar muy al hilo de la estética collegecore o preppy paseando por las calles del Upper East Side de Nueva York, pero si seguimos profundizando y aparecen detalles como el estilo tartán en blanco y negro o la plataforma en los calcetines el look adquiere un talante algo más punky. El último look de Jenna Ortega ha sido una fusión de ambos estilos que a priori parecen antagonistas, muy lejos de la realidad.
La actriz que encarna a Miércoles portaba una falda de tablas en color marrón tierra y la combinaba con un tank top en color rojo. A ello superponía la pieza estrella de su estilismo, una americana de hombros marcados con estampado de tartán en blanco y negro. Otro toque nostálgico lo aportaban sus calcetines blancos que destacaban sobre sus mocasines en color burdeos.
Enrique Melendez, estilista de la intérprete, compartía en sus redes la inspiración a la hora de crear este look que, ni más ni menos, era Adam Maitland, uno de los personajes principales de la versión de Tim Burton de 1988 de la película, Beetlejuice. En plena gira promocional de la nueva versión Beetlejuice Beetlejuice, a cuya protagonista encarna Jenna, era de esperar que las alusiones a los personajes fueran habituales. Melendez demostraba su maestría a la hora de interpretar la relación personaje-persona, no solo en esta ocasión, sino que lo hizo de forma apoteósica durante los eventos promocionales de Wednesday –todas queríamos ser góticas y solo había cabida para el negro en nuestros conjuntos, bueno también para el blanco–. Esta vez, el tartán vuelve de forma triunfante y Jenna Ortega lo ha demostrado con su americana.