La red social X, antes Twitter, ha sufrido caídas en su actividad durante todo este lunes. Su dueño, Elon Musk, ha dicho que la causa de las interrupciones en el servicio habría sido un “ciberataque masivo” contra la plataforma. “Nos atacan cada día, pero esta vez ha sido con muchos recursos. O bien un grupo grande y coordinado o bien un país están relacionados. Investigando”, ha añadido Musk en un mensaje en X.
En respuesta a otro usuario que le dice que “están tratando de silenciarte a ti y a tu plataforma”, Musk ha respondido un escueto “sí”. El presunto ciberataque llega cuando otra de sus empresas, Tesla, ha caído en ventas en Europa y algunos de sus concesionarios y vehículos han sufrido ataques en EE UU. En un mensaje este sábado, Musk acusó a grupos progresistas y a otros millonarios de impulsar los ataques contra Tesla. Musk tuvo también una disputa con un ministro polaco por el uso en Ucrania de Starlink, su empresa que da servicio de internet vía satélite.
En la lista de frentes abiertos de Musk está también su papel como jefe de DOGE, el Departamento de Eficiencia Gubernamental creado por Trump para reducir el gasto público. Muchas de sus acciones se han visto envueltas en polémicas por sus objetivos poco claros y la confusión al comunicar sus aparentes éxitos.
La caída de X es especialmente notable porque, tras la compra de Twitter en octubre de 2022, Musk recortó considerablemente la plantilla. Desde entonces se esperaban caídas o problemas en la actividad de la red, que nunca acabaron de llegar. Este lunes fue una de las caídas más notables y Musk la achacó a un ataque, no a un problema interno.
