Esta bruma de almohada de Rituals consigue que mi cama huela como la de un hotel
Desde que viví la experiencia de alojarme en Royal Hideaway Corales Villas, un hotel en Tenerife enfocado en el descanso de sus huéspedes, he intentado aplicar todos los trucos que aprendí durante mi estancia para tener un sueño reparador y de calidad. Dormir con antifaz para que mi cerebro perciba la oscuridad completa y facilitar así la entrada en las fases más profundas o adelantar la hora de hacer ejercicio y cenar para así darle al cuerpo su tiempo para hacer la digestión y entrar en un estado de calma son algunos de los hábitos que he adoptado.
Pero de todos los tips que contemplados en la guía sleep well, elaborada por Jana Fernández, consultora y divulgadora especializada en bienestar y descanso, hay uno que ha conseguido hacer de mi rutina presueño un momento muy placentero. Consiste en rociar la almohada –y, en mi caso, también las sábanas– con una bruma de Rituals con aroma a lavanda. “La lavanda es la única planta que se ha demostrado científicamente que calma el sistema nervioso”, concede la coach del sueño, sobre la esencia en espray que ofrecen en el hotel dentro del pack que encuentran los huéspedes en su habitación.
Se trata de un pillow mist que pertenece a la línea Sleep de la gama The Ritual of Jing; una serie de productos inspirados en el concepto ancestral del Jing chino y que representa la calma, la paz y la tranquilidad. En su elaboración utilizan aceites esenciales de lavanda, loto sagrado, madera sagrada y jujube, que prometen relajar la mente y el espíritu.
Lo que más me gusta de este producto es que se puede introducir en la rutina de noche con un gesto tan sencillo como el de pulverizar la almohada. Está elaborado sin alcohol y no hay riesgo de mancha en los tejidos, por lo que es apto para las superficies más delicadas. Y, más allá de promover un estado de calma y bienestar, el aroma delicado, con una mezcla de notas florales y silvestres, consigue elevar el ambiente al instante.
Yo lo utilizo por las mañanas, después de hacer la cama, con la intención de renovar el ambiente; y, por supuesto, justo antes de dormir, haciendo especial hincapié en las almohadas y cojines. Y puede que sea porque la primera vez que utilicé este producto fue en la habitación de Corales Villas, pero en cuanto rocío mis sábanas con la bruma para la almohada de Rituals, siento que me transporta automáticamente a una cama de hotel. Y, sinceramente, creo que no hay una sensación más agradable que esa a la hora de ir a dormir.