Podemos creer lo contrario, gracias a una década donde la prioridad han sido las propiedades intelectuales y se ha descuidado la generación de nuevos talentos, pero sigue habiendo un placer inefable en ver a estrellas de cine juntas pasando un buen rato durante un par de horas. Incluso aunque sea a través de proyectos que parecen excusas para unas vacaciones pagadas como en el caso de ‘Viaje al paraíso’.
Matrimoniadas en Bali
Julia Roberts y George Clooney recuperan esa química que les ha llevado a conseguir varios clásicos memorables para una comedia romántica vacacional estimable, aunque un poco por debajo de sus posibilidades. No es mal plan de verano, ahora que se va a poder ver hoy en televisión a través de La 1 a partir de las 23 horas de la noche.
David y Georgia son una pareja divorciada desde hace décadas que raramente pueden pasar un rato juntos, ni siquiera en un evento como la graduación de su hija de la universidad. Esta se va a pasar unas vacaciones en Bali con una amiga antes de empezar su vida laboral, pero allí encontrará inesperadamente el amor y una temprana propuesta de matrimonio. Sus padres se dirigirán de manera express a la isla intentando evitar que cometa el mismo error que ellos.
Una premisa bien sencilla para hacer una romcom madura que se disfrute sin complicaciones. Pero como estamos en la era moderna donde la romcom de estudio no existe o no tiene presupuesto de verdad, queda una sensación excesivamente ligera o incluso barata en cómo está realizada en general.
No abre completamente la incredulidad a que se está visitando un espacio paradisiaco, o siquiera que se esté recreando en otro sitio. Y tampoco ofrece mucho cuidado a personajes o situaciones para poder justificar más de hora y media de metraje, que sería lo ideal. Al final, buena parte de su éxito tiene que residir en sus estrellas y la posibilidad de un secundario robaescenas.
Lo último lo encuentran en Billie Lourd. Lo primero aparece en buena parte, sobre todo cuando no tienen que exagerar el enfado que mantienen duramente largo rato sus personajes. Lo suficiente para dar el rato simpático que promete y que precipitó que terminarse recaudando unos 168 millones de dólares en taquilla. Quizá no tan arrollador para resucitar el género, pero sí lo bastante notable para mostrar que hay un público para este cine.
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