El eclecticismo es una de las cualidades indiscutibles de Jennifer Lopez en cuanto a estilo se refiere. La artista, que es capaz igual de lucir un chándal con zapatillas (bolso de Hermès en mano) que un vestido floreado, ha vuelto a poner en práctica su lado más ladylike. Lo hizo ayer, fundiéndose con los transeúntes que paseaban por las calles de Los Ángeles aprovechando el perenne buen tiempo de la ciudad.
Lopez se decantó por un total look en color negro, formado por unos pantalones de sastre de corte capri, un jersey de punto con una especie de lazada al cuello y un minibolso de Chanel con asa rígida colgando de la mano izquierda. Le añadió unas gafas oscuras de líneas delicadas que armonizaban con su flequillo abierto y su recogido despeinado.
Bellocqimages/Bauer-Griffin
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El ojo se centra especialmente en las bailarinas, un diseño plano y satinado caracterizado por una perla en el empeine y unas cintas que se ajustan al tobillo, como si de unas auténticas zapatillas de ballet se refiere. Son las D-Joy de Dior, y ya se las vimos el pasado mes de septiembre combinadas con un look un poco parecido, con unos pantalones de raya diplomática anchos y una camisa blanca con las mangas remangadas hasta la altura del codo.
Aunque las bailarinas llevan ya varias temporadas viviendo una edad dorada, la realidad es que este tipo de diseño promete seguir arrasando el año que viene. Entre las tendencias de primavera-verano 2025 destaca especialmente la influencia del balletcore: firmas como Ferragamo o Simone Rocha ponen el ballet en primer plano para traer de vuelta el tutú o las cintas de raso anudadas. Los colores como el rosa pastel o las calzas también están llamadas a acaparar todos nuestros looks de la próxima temporada. Empezando por las bailarinas de Jennifer Lopez.
Ferragamo primavera-verano 2025.
Simone Rocha primavera-verano 2025.
