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La leyenda de Jimi Hendrix es inmortal. Su forma de tocar la guitarra, innovadora y que desafiaba la lógica, obligó a los principales héroes de la guitarra de la época a mejorar su desempeño o quedarse a su sombra.
Terry Reid recordó haber visto a Hendrix por primera vez en una sala en la que también estaban Brian Jones, Paul McCartney y Keith Richards en el Scotch of St. James.
“Yo estaba observando la expresión en la parte posterior de la cabeza de la gente .Pete Townshend estaba allí, todos estaban allí y todos estaban fascinados. Era como recortes de cartón. Nadie se movió”.
Apenas unos días antes de su trágica muerte el 18 de septiembre de 1970 , el músico subió al escenario por última vez en el legendario local londinense Ronnie Scott’s. Era una sala similar al Scotch of St. James
Era muy distinto del tipo de local que Jimi Hendrix había llamado hogar una vez que alcanzó el éxito. Sin embargo, a pesar de ser uno de los nombres más destacados del rock ‘n’ roll, no pudo resistir la oportunidad de seguir tocando en pequeños clubes cuando se le presentó la oportunidad.
Ser testigo del mundialmente famoso Hendrix en Ronnie Scott’s es una oportunidad que a muchos les gustaría tener. Sin embargo, el hecho de que fuera la última vez que subió al escenario le añade aún más peso a su actuación del 16 de septiembre de 1970.
Al estilo típico de Hendrix, su aparición no fue anunciada antes de su actuación, lo que la hizo aún más especial para los asistentes. En ese momento, su viejo amigo y ex líder de Animals, Eric Burdon, estaba realizando una residencia de una semana en el famoso local de Soho con su nueva banda War. Maravillosa banda
Cuando Hendrix se presentó en el local el 15 de septiembre, Burdon no reconoció a su amigo porque estaba “muy fuera de sí”. En una ocasión explicó:
“Llevaba su guitarra, pero se tambaleaba demasiado para tocar, así que le dije que volviera mañana por la noche”.
A pesar de sus problemas personales, Hendrix escuchó el consejo de su amigo. El día 16, justo un día después, Hendrix llegó en mejor forma e hizo un breve pero histórico cameo durante su segundo set de la noche.
“Presenté a Jimi al público” escribió Burdon en su autobiografía Don’t Let Me Be Misunderstood . “El típico público de jazz londinense intentó mostrar indiferencia cuando subió al escenario, pero una ola de aplausos recibió al mejor guitarrista del mundo”.
Juntos, tocaron versiones extensas y fulminantes de dos covers de “Mother Earth” de Memphis Slim y “Tobacco Road” de John D. Loudermilk. Aunque no fue un concierto de Hendrix como cabeza de cartel, hizo vibrar a todos los presentes. En su autobiografía, Burdon escribió que el guitarrista “volaba” durante su actuación que robó el espectáculo y que su presencia hizo que el guitarrista de War, Howard Scott, “tocara mejor que nunca”.
Hendrix y Monika Dannemann cenaron a altas horas de la noche en el Speakeasy antes de retirarse al Hotel Samarkand, donde ella vivía.
Para su horror, menos de 48 horas después, Dannemann encontró a Hendrix inconsciente y el ícono del rock fue declarado muerto poco después.
