Más de 30 años después, Julia Roberts volvía a confiar en esta mezcla para recibir en París la condecoración de Chevalier de la Orden de las Artes y Letras de la República Francesa. La pieza protagonista de este guiño a su pasado estilístico fue también un traje de chaqueta gris, pero en lugar de optar por un icónico diseño de Giorgio Armani como lo hizo hace más de 30 años, la actriz elegía un dos piezas de Stella McCartney muy alejado de la propuesta original.
A lo largo de los últimos años, el traje de chaqueta ha logrado adaptarse a diferentes generaciones, reinventándose para seguir siendo una prenda sofisticada apetecible entre las nuevas generaciones. Ya no solo se lleva con stilettos, sino que combina a la perfección con nuestras sneakers favoritas. La capacidad de este look para mantenerse vigente y su conexión con el empoderamiento femenino, lo convierte en una pieza atemporal que siempre estará de moda, tal y como lo ha vuelto a demostrar Julia Roberts.
Loa zapatos que elegía Roberts fueron los Maison’s Viv’ in the City en gris y el bolso Viv’ Choc en burdeos ambos firmados por Roger Vivier. Además, elegía unas gafas XXL que le aportaban un toque relajado al estilismo perfecto para un evento de mañana.
Finalmente, optó por ondas mucho más grandes para su pelo que las que elegía en los 90 y su color de pelo se acercaba más al pelirrojo que al rubio platino que, junto con su sonrisa, hipnotizaban al mundo del cine y de la moda.
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