Anoche, Kate Middleton apareció radiante con un vestido rojo oscuro de Givenchy por Sarah Burton en un banquete de Estado en el castillo de Windsor en honor del presidente francés Emmanuel Macron. El vaporoso vestido de noche en crepé de seda plisada se completaba con un detalle de capa desde los hombros.
La princesa de Gales lo complementó con un bolso de mano bordado con un motivo de lirio de los valles, así como con la famosa tiara Lover’s Knot. La diadema a modo de corona, elaborada por la Casa Garrard en 1913, está realizada en oro, plata y diamantes y aderezada con una sucesión 19 perlas colgantes. La Lover’s Knot fue además una de las joyas favoritas de la difunta Lady Di.
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El hecho de que Kate Middleton se haya decantado por un diseño de Sarah Burton para Givenchy es una auténtica lección de diplomacia: optar por una creación de una mujer británica para una casa de moda francesa sirve para ilustrar simbólicamente la relación simbiótica entre los dos países europeos.