Nada puede fallar cuando Keira Knightley pisa la alfombra roja
Ver a la británica en la gran pantalla es todo un placer (sobre todo cuando se trata de proyectos de época, su expertise), aunque hay que reconocer que sus apariciones por la alfombra roja consiguen el mismo efecto: que nos quedemos embelesados mirándola. Keira Knightley acudía ayer al Biarritz Film Festival Nouvelles Vagues como invitada especial vestida de pies a cabeza por Chanel, la marca con la que (casi) podemos jurar que se casaría si contraer matrimonio con una firma fuera posible.
Para posar en este certamen celebrado en el sur de Francia, eligió un conjunto de dos piezas: una camisa recta y un pantalón palazzo, ambos cubiertos por brillantes lentejuelas. Pero además de sus paillettes, el detalle distintivo del conjunto era el cuello contrastado en blanco de estilo Peter Pan y los puños de las mangas a juego, que añadían un toque naíf –aunque también masculino– al look. Por otro lado, la actriz apostó por peinar su bob castaño con ondas suaves y eligió un maquillaje natural para dejar que el atuendo hablara por sí solo. Prescindió además de todo tipo de accesorios, muy en línea con su tan característica sencillez a la hora de vestir.
Y hablando de su estilo, hemos encontrado la clave para que cada uno de sus looks resulten especiales: el hecho de que no se deja llevar por las tendencias efímeras. Su mayor peculiaridad es que su estilo bebe de un romanticismo sin estridencias, algo que encaja maravillosamente con la filosofía de Chanel. En este caso, la sobriedad de la silueta del diseño se entremezclaba con la espontaneidad de las lentejuelas, lo que se tradujo en un estilismo equilibrado con el que imponerse con mucha autenticidad en una alfombra roja. ¡Bravo, Keira!
JB Lacroix/Getty Images