El pago de dividendos por parte de la banca está favoreciendo una retribución récord a nivel global con especial incidencia en España. La guerra que mantienen BBVA y Sabadell, uno por conservar su independencia y el otro por adquirir a la entidad vallesana, ha puesto el pago de dividendos en el epicentro de la disputa, con generosas retribuciones para atraerse el favor de los accionistas. Según un estudio de Capital Group, los dividendos de la banca han colocado a España como el país europeo donde más crecen los dividendos, junto a Dinamarca. Las cifras alcanzan niveles récord en nuestro país y también a nivel mundial, con la banca como protagonista.
En el primer semestre de 2025, los dividendos globales alcanzaron la cifra récord de 1,14 billones de dólares, algo menos de un billón de dólares, lo que supone un crecimiento del 7,7% interanual en términos absolutos y del 6,2% en término netos, una vez ajustado el efecto de los pagos extraordinarios o el tipo de cambio, de acuerdo a un estudio de la gestora estadounidense Capital Group. El sector financiero ha liderado ese crecimiento en el mundo, con un incremento de los dividendos netos del 9,2%, hasta la cifra récord de 299.000 millones de dólares, 266.00 millones de euros. Y esos máximos se trasladan también a España, en gran medida gracias a los pagos de las entidades financieras.
Los dividendos habían crecido en España a junio el 12,7% interanual —una vez ajustados factores extraordinarios— hasta los 16.700 millones de dólares (14.200 millones de euros), una cifra sin precedentes según destaca Capital Group. Más de un cuarto de este incremento tiene que ver con el dividendo entregado por Sabadell, que ha cuadruplicado el pago frente al primer semestre de 2024 hasta los 670 millones de euros dentro de su estrategia de defensa frente a la opa hostil de BBVA. «El operador aeroportuario español Aena también realizó una importante contribución, ya que el auge del turismo en España impulsó los ingresos y las ganancias», señala el informe de Capital Group. Por el contrario, Redeia fue la única que realizó un recorte notable “ya que el regulador redujo sus niveles de beneficios permitidos y la empresa optó por conservar el efectivo para gastos de capital en proyectos de redes y telecomunicaciones en lugar de entregarlo a los accionistas”, prosigue el informe. Aun así, la gestora del sistema eléctrico español es uno de los contribuyentes más pequeños al total de dividendos, por lo que el impacto fue muy limitado.
El alza de dividendos en España ha sido de hecho uno de los principales contribuyentes al ascenso de la retribución a nivel europeo, que arroja un incremento en los dividendos netos del 5,6% interanual, ligeramente por debajo del promedio global. De acuerdo al informe de Capital Group, los pagos en España y Dinamarca han compensado la debilidad en la retribución al accionista en Italia y Alemania . «El fabricante danés de Ozempic, Novo Nordisk, lideró la región, comprometiéndose con la disciplina de capital de devolver el excedente de efectivo a los accionistas y duplicando con creces su dividendo.
Moller Maersk, también en Dinamarca, fue la segunda empresa que más contribuyó al crecimiento del primer semestre en Europa gracias al aumento de los beneficios derivados del incremento de las tarifas de transporte marítimo», señala la gestora estadounidense. La italiana Stellantis fue, en cambio, la compañía que mayor impacto negativo tuvo en el cómputo de dividendos europeos: el fuerte recorte de su dividendo redujo en 1,2 puntos porcentuales la tasa de crecimiento de la región en el primer semestre de 2025. En el conjunto de Europa, nueve de cada diez empresas aumentaron sus repartos o los mantuvieron estables con respecto al año anterior en el primer semestre de 2025.
A nivel mundial, el 86% de las empresas aumentaron los dividendos o los mantuvieron estables en el primer semestre. Japón es el mercado en que más creció la retribución al accionista, un 13,8% interanual, más del doble que en el resto del mundo, hasta un volumen récord de 54.900 millones de dólares. Estados Unidos fue el país que más contribuyó al pago de dividendos, también con un pago récord de 71.300 millones de dólares (60.000 millones de euros) tras un crecimiento del 6,1%, en línea con la media mundial. Según apunta Mario González, responsable de Capital Group en Iberia, US offshore y América Latina, “las empresas que reparten dividendos han servido durante mucho tiempo como un puerto en la tormenta, ofreciendo a los inversores un colchón cuando los mercados se vuelven turbulentos”.