A veces pienso que paso demasiado tiempo en TikTok, pero luego me recomiendan productos como la mascarilla de colágeno de Biodance, y de repente siento que el scroll desenfrenado valió la pena. Durante semanas, me topé con vídeos de chicas que se aplicaban una mascarilla blanca y cremosa en la cara durante sus vuelos. Al aterrizar, la película blanquecina se había vuelto completamente transparente. Como serpientes mudando la piel, las TikTokers se quitaban la mascarilla de la cara y mostraban un cutis radiante. Al principio, consideré que esta mascarilla era una moda superflua más, en lugar de un producto realmente eficaz. Un día no pude aguantar más e hice un pedido en Amazon a una hora intempestiva. Después de todo, a lo mejor sí valía la pena probar una mascarilla de colágeno durante la noche.
A estas alturas, muchos hemos oído hablar de los beneficios del colágeno en el cuidado de la piel. «El colágeno es fundamental para nuestra salud porque constituye el 30% de todas las proteínas de nuestro cuerpo», explicó el nutricionista Josh Axe a mi colega de Vogue, la editora de belleza Arden Fanning Andrews. Añadió también que nuestras reservas de colágeno empiezan a disminuir en torno a los 25 años y quien quiera reponerlas debe consumirlo a través de suplementos de colágeno. Aunque he observado mejoras en la piel y en el crecimiento del cabello al utilizar elixires de Vital Proteins y Hum Nutrition, no había pensado en aplicar colágeno por vía tópica y, para ser sincera, no estaba segura de que fuera a funcionar.
¿Qué hace una mascarilla facial de colágeno?
«Una mascarilla facial de colágeno permite la aplicación tópica de ingredientes hidratantes durante un periodo de tiempo prolongado», me explica la Dra. Mina Amin. «Contrariamente a la creencia popular, estas mascarillas en realidad no van a estimular la producción de colágeno«. El colágeno, continúa, es difícil de absorber por vía tópica debido a su alto peso molecular. «Las mascarillas son estupendas para hidratar, pero no tienen los efectos duraderos que la gente espera».
¿Funciona realmente la mascarilla de colágeno de Biodance?
Aunque ya era consciente que la mascarilla de Biodance recién recibida no iba a estimular la producción de colágeno en las células para reafirmar y rellenar la piel de forma duradera, decidí probarla de todos modos. Según el dermatólogo Brendan Camp, el popular tratamiento tiene todavía algunos méritos valiosos. Para empezar, recordemos que lo que hacen las mascarillas faciales de tela es mejorar la hidratación de la piel. «Tienen una acción oclusiva que atrapa la humedad en la piel», dice. “El resultado es una piel temporalmente más luminosa, más joven y más suave”.
Además de colágeno hidrolizado, contiene un filtrado de fermento de galactomyces para mejorar el tono y la textura de la piel. También aparece la niacinamida, citada por Camp por su «capacidad para igualar el tono de la piel, reducir la inflamación y disminuir el aspecto de los poros». De igual importancia es su contenido en ácido hialurónico, que según explica el experto «mejora la hidratación de la piel porque mejora la capacidad de las células de la piel para retener y atraer la humedad». Juntando todos estos elementos, se obtiene una especie de tratamiento milagroso que nutre, alisa e ilumina la piel en cuestión de horas.
Horas. Sí, has leído bien. A diferencia de las mascarillas tradicionales, que requieren más de 20 minutos para actuar, en las instrucciones de uso de Biodance se recomienda una aplicarla la mascarilla de tres a cuatro horas o, en el mejor de los casos, toda la noche. Así que, muy obediente, limpié la piel (doble limpieza, por si sirve acaso), la tonifiqué (con la loción de SK-II) y desenvolví la mascarilla. Fabricada con un material similar al gel, la mascarilla se presenta en dos piezas. Me coloqué la mitad superior sobre la frente y los ojos, y la mitad inferior alrededor de la boca y la barbilla. Mientras que muchas mascarillas no se ajustan bien a la piel, esta se adhirió con facilidad, lo que facilita seguir haciendo cosas o tumbarse en la cama. Me refrescó la piel al instante. Y aunque tuve que saltarme mi crema hidratante nocturna, note la piel más hidratada que nunca sin que se moviera ni un milímetro. A las dos horas, activé la cámara del móvil para comprobar su evolución. Al tiempo de llevarla puesta, la mascarilla empieza a volverse transparente, lo que indica que la piel está absorbiendo los ingredientes del gel. Antes de darme cuenta, sonó el despertador con la mascarilla todavía puesta (un shock para la que escribe, que suele dormir boca abajo). Al igual que los mencionados TikToks que me convencieron para comprar el producto en primer lugar, retiré la capa final con facilidad: ya no tenía textura de gel, sino que se había transformado en una fina película. Me quedé boquiabierta al ver mi cutis. La congestión y los poros dilatados que tenía en la frente la noche anterior habían desaparecido. Mi piel estaba suave como la de un bebé e increíblemente tersa, como si acabara de salir del sillón de la esteticista.
