El cine siempre encuentra en la temporada estival la ocasión idónea para ambientar las mejores películas románticas. Al fin y al cabo, las vacaciones son sinónimo de escapar de los abatimientos del día a día y de abrirse a las posibilidades del amor en todas sus formas. Entre la brisa marina, y con el salitre en el cuerpo, los personajes de estas cintas viven historias inolvidables, corroborando así que el verano y el amor nacieron para entenderse.
‘Mi verano de amor’ (2004)
Dirigido por el premiado Pawel Pawlikowski (Ida, Cold War), el filme transcurre en Yorkshire, donde dos jóvenes, Mona (Natalie Press) y Tamsin (Emily Blunt), viven su primer idilio. Aunque provienen de diferentes clases sociales, ambas mujeres se encuentran insatisfechas con sus vidas, un hecho que cambiará el verano que se conozcan.
‘Belleza robada’ (1996)
Como consecuencia del suicidio de su madre, Lucy (Liv Tyler) decide tomarse un descanso pasando el verano en la Toscana. Rodeada de excéntricas compañías, se reencontrará con el joven del que se enamoró hace unos años en su última visita, tratará de descubrir la identidad de su padre y entablará una amistad con un moribundo escritor, interpretado por Jeremy Irons. Por si todo esto fuera poco, Belleza robada está dirigida por Bernardo Bertolucci (Soñadores, El último emperador).
Una joven Liv Tyler en un fotograma de ‘Belleza robada’, dirigida por Bernardo Bertolucci/United Archives / Cordon Press
‘Gregory’s Girl’ (1981)
Esta comedia romántica escocesa cuenta la historia de Gregory, un adolescente normal y corriente –aunque con mala fortuna jugando al fútbol– que se enamora de Dorothy, la chica que le sustituirá en su equipo. Para conquistarla, necesitará la ayuda de su hermana pequeña. Gregory’s Girl fue clasificada en el puesto número 30 por el British Film Institute, en su lista sobre las mejores películas románticas británicas del siglo XX.
‘La última canción’ (2010)
Protagonizada por Miley Cyrus y Liam Hemsworth –una de las parejas más mediáticas de la década– y basada en una novela de Nicholas Sparks, La última canción cuenta la historia de una joven que se ve obligada a trasladarse a un pueblecito sureño tras el divorcio de sus padres. Allí, intentará recuperar la relación con su progenitor, a la vez que descubre su primer amor y su pasión por la música. Se puede ver en Disney+.
‘Mi chica’ (1991)
Macaulay Culkin fue el niño de moda en el cine de los 90 y con mi chica demostró que, además de ser un chaval que vendía todo lo que le pusieran por delante, era también buen actor. Protagoniza Mi chica junto a Anna Chlumsky, la historia de un verano de bicicletas, baños y amistad entre un niño y una niña algo hipocondriaca. Probablemente uno de los finales más desgarradores de la historia del cine.