En el cuarto episodio de la tercera temporada, los espectadores pueden reconocer la imponente fachada del palacio de Hampton Court, iluminada con antorchas, cubierta de terciopelo y decorada con adornos florales. El edificio Tudor y antigua residencia de Enrique VIII, que ha sido escenario tanto de Los Bridgerton como de La reina Carlota, bien merece una excursión de un día desde el centro de Londres hasta el distrito de Richmond upon Thames: es fácil pasar horas perdiéndose en sus suntuosos salones, el gran salón de baile y el patio de la fuente, por no hablar de los extensos jardines y el laberinto.
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En el primer episodio de la tercera temporada, el clan (y Penélope, con su sensual nuevo look) se reúnen para el espectacular Baile de las Cuatro Estaciones de Lady Danbury, en el que su residencia de color miel –vista en las tres temporadas de Los Bridgerton– se transforma con velas y elaborados adornos florales para la ocasión. El verdadero edificio en cuestión no está en Londres, sino en Bath, y contiene una impresionante colección de arte y objetos decorativos perteneciente al baronet Sir William Holburne. Vale la pena echar un vistazo a las obras maestras de Gainsborough y Turner, antes de darse un paseo por los pintorescos jardines Sydney Pleasure Gardens, a espaldas del museo. Sentirás que viajas atrás en el tiempo.
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