Para los amantes de la naturaleza, San Martín de Valdeiglesias ofrece una infinidad de planes, entre los que destaca el trekking, las rutas a caballo. escalada, tiro con arco, paintball y recolección de setas. A su vez este pueblo alberga un bosque encantado, en el interior de un jardín botánico en el que es posible encontrar más de 500 tipos diferentes de plantas. Como recomendación gastronómica, tras visitar este enclave natural y monumental es indispensable probar los churros de Panadería Chico, de los más famosos de la Comunidad de Madrid.
Hayedo de Montejo
Este espacio natural se encuentra en el municipio de Montejo de la Sierra, un paraje con visitas limitadas y totalmente guiadas, debido a la sensibilidad de su entorno. Entre su vegetación destacan los robles centenarios y los pinares silvestres. Un recorrido de 222 hectáreas repleto de fauna y flora que, en 2017, fue declarado como Patrimonio Natural de la Humanidad por la UNESCO.
Carlos Sanchez
Este espacio natural dispone de una amplia zona recreativa para todos los gustos y dificultades. Si lo que quieres es un paseo agradable en familia, lo más recomendable es la Senda del Río. A un mismo nivel se encuentra la Senda de la Ladera, ideal si es la primera vez que vas a Hayedo. Sin embargo, para los más atrevidos la apuesta es la Senda del Mirador, donde perderse con sus increíbles vistas panorámicas a la cuenca del Jarama, o disfrutar de toda su vegetación.
Rascafría
Este pequeño pueblo, situado a menos de 100 km de la capital, es una de las joyas naturales de la Comunidad de Madrid, que encierra múltiples tesoros en su interior. Como enclave monumental es imprescindible visitar el Monasterio de Santa María del Paular, aún habitado por monjes que venden los productos más famosos de la región: licores, quesos y miel.
