Los mejores zapatos de verano para cuidar los pies
A estas alturas de la película, soñamos con ponernos el bañador y calzarnos las chanclas de 9 a 9. Es humano (muy humano) pero puede que no sea la mejor opción para la salud de nuestros pies. De hecho, aunque en nuestra mente unas zapatillas de dedo sean la alternativa más cómoda del mundo, la realidad es que para la salud podal no son lo mejor. Prueba de ello es, por ejemplo, el hecho de que en el centro Assari Wellness de Madrid la demanda de tratamientos para la fascitis plantar suba exponencialmente durante estos meses. Y uno de los motivos de esta incidencia en verano es precisamente, según nos confirma su fundadora Inma Blanquer, por el uso (y abuso) de chanclas. No pasa nada porque las utilizemos un rato para ir a la playa o a la piscina, pero entregarse a ellas de día y de noche (incluso convencidas de su comodidad) hace que la planta del pie sufra mayor carga y presión y acabe inflamándose, sobre todo porque no tienen sujeción en el empeine o en el tobillo.
“La fascia es una banda fibrosa que funciona como una especie de muelle. El exceso de tensión o presión en ella puede causar inflamación y precisamente el uso de calzado como las chanclas, que suelen tener suelas que no amortiguan lo suficiente porque son muy planas o delgadas, hacen que el peso del cuerpo no se reparta correctamente y que se cambie el centro de gravedad. Esto hace que se ponga más presión en el talón y afecta al resto del cuerpo por no tener soporte, ni amortiguación, ni puntos de sujeción”, explica la experta. Por eso recomienda con fervor no abusar de ellas y alternar el uso de diferentes tipos de calzado de manera habitual.
Entre las mejores alternativas para la salud plantar están, además de las zapatillas de deporte, las sandalias funcionales (como las omnipresentes Birkenstock) con suelas más gruesas, con la forma anatómica del pie o versiones con plantillas almohadilladas que permitan repartir la carga del peso del cuerpo. Siempre es mejor elegir sandalias con sujección en el empeine que solo las versiones de dedo.
Por qué es tan importante la salud podal
No solo de pedicuras viven los cuidados de los pies. Son una parte fundamental de nuestro bienestar (aunque sean los grandes olvidados) y, como señala la experta de Assari Wellness, al sujetar la estructura osteomuscular del cuerpo es importante cuidarlos porque afectan de una manera holística, es decir, si se lesionan repercute a todo tu cuerpo y a su movilidad (basta con recordar un simple dolor de pies tras una noche con tacones para entenderlo).
En casos de fascitis plantar se puede recurrir a protocolos de fisioterapia y tratamientos de reflexologia podal para liberar esa tensión e inflamación de la fascia. De hecho, Blanquer insiste en que una fascitis tratada a tiempo puede durar tan solo unos días, pero en cambio, si se deja pasar, se puede cronificar.
Algunos remedios caseros para la fascitis plantar
He aquí algunas de las recomendaciones de Imma Blanquer para problemas de fascitis plantar: