Como era de esperar, Copenhague, con sus adoquines y su cultura de la bici, era la ciudad perfecta para las bailarinas. El pasado agosto, Vogue destacó que todo el mundo llevaba zapatos planos de diseñador, desde las bailarinas de Alaïa adornadas con cristales hasta las Tabi de Margiela con su puntera dividida. «En una época en la que la moda se basa en siluetas minimalistas y prendas muy ponibles, es divertido añadir alegría y personalidad a través de los accesorios, sobre todo del calzado», explicaba entonces Madeline Fass, editora de mercado de moda de Vogue.com, y añadía: «Las Mary-Janes cubiertas de cristales de Alaïa, aunque van adornadas, son totalmente planas. Marcan estilo, pero son ideales para llevarlas todo el día. En una Copenhague cubierta de adoquines, me alegré mucho de llevarlas, por no mencionar que añadieron un poco de brillo a una meteorología que, de otro modo, sería deprimente».
Este año, sin embargo, se ha notado un cambio sutil y muchas asistentes han vuelto a los tacones. Por supuesto, todavía se pueden ver Adidas SL72 y zapatos jelly de rejilla en las fotos de street style, pero el calzado más popular en agosto de 2024 ha sido la sandalia de inspiración años 90 o el mule como sacado del vestidor de Carrie Bradshaw. Estos tacones no muy altos aportan lustre a cualquier look, pero aun así te da pereza lo de ir en tacones durante horas y horas, sigue habiendo opciones cómodas: personalmente puedo dar fe de que los mules con nudo Avenue 50 de Jimmy Choo son un calzado realista para llevar todo el día.
Joy Montgomery, editora commerce de Vogue Reino Unido, se encuentra precisamente en Copenhague subida a un tacón sensato y se ha dado cuenta de este cambio en el calzado: «Mientras que los zapatos planos han dominado en los últimos años, parece como si el tacón kitten de los 90 estuviera volviendo sigilosamente en 2024″, dice desde los desfiles. «A juzgar por lo que llevan las asistentes a los desfiles de la semana de la moda de Copenhague, el combo más popular parece ser el tacón kitten más jorts o pantalones capri, un conjunto clásico de Carrie Bradshaw».
Carrie Bradshaw era partidaria de los mules peep-toe (preferiblemente de Manolo Blahnik), por lo que es lógico que este calzado de los 90 se combine con otras tendencias nostálgicas como los jorts, las faldas globo y los pantalones cargo. Las sandalias altas de tiras también han destacado en las pasarelas de primavera-verano 2024, ya que firmas como Khaite, Jil Sander y Ferragamo nos trajeron zapatos con tiras asimétricas y un aire minimalista de los 90. Hanna Stefansson acudió a un desfile en bicicleta con bermudas blancas y mules de tiras de Sania D’Mina, prueba de la inesperada practicidad de esta tendencia.
Este artículo se publicó originalmente en Vogue.co.uk