Los lunares: el estampado clásico que ha conquistado el verano 2025
El estampado de lunares o polka dots –nombre que reciben en ingles– es uno de esos prints clásicos que nunca desaparecen del todo, pero que cada cierto tiempo regresan con una fuerza renovada y muy contundente. En 2025, los lunares han conquistado nuevamente las tendencias de primavera-verano protagonizando colecciones que van desde lo romántico hasta lo minimalista. Pero, ¿cómo llevarlos con elegancia y profesionalismo en un entorno laboral?
Todo lo que debes saber está en Vogue Líderes:
Aunque muchas veces se asocian con un aire más desenfadado o incluso lúdico, los lunares pueden ser perfectamente compatibles con un look de oficina si se usan de manera equilibrada. Uno de los consejos más habituales es optar por tonos neutros. Los lunares en blanco y negro son la opción más segura y versátil para ambientes más serios como los laborales. También existen otras combinaciones como el fondo marrón salpicado de topitos blancos que recuerda a Julia Roberts en Pretty Woman, que mantienen la formalidad sin perder estilo.
Más allá de los colores neutros, aportar un toque de color también puede funcionar siempre que sea sin pasarse –recordemos que en la oficina el menos siempre es más–, como puede ser un accesorio que de vida al conjunto. Cuidar el tamaño de los lunares y su combinación con otros estampados también es clave. Los lunares pequeños o medianos son más discretos y fáciles de combinar. Evita los estampados demasiado grandes o que propicien mucho contraste si no quieres ser el centro de atención o que tu look resulte visualmente excesivo. Aquí funcionan mucho los cortes clásicos y equilibrar tus piezas de lunares con prendas lisas como una falda lápiz o un pantalón de vestir.
Si prefieres no llevar prendas estampadas, los lunares también pueden aparecer en accesorios como pañuelos, cinturones o zapatos, aportando un guiño divertido, adorable y elegante a tu look. Un pañuelo con lunares, por ejemplo, es un recurso clásico y elegante que, anudado al cuello o atado con sutileza al asa del bolso, aporta un aire muy sofisticado. Si eliges un diseño en blanco y negro o en tonos neutros, conseguirás ese equilibrio ideal entre tendencia y sobriedad. Lo mismo ocurre con los cinturones: uno fino con un estampado pequeño de lunares puede marcar la silueta en un vestido liso o acompañar un pantalón de pinzas, aportando dinamismo sin estridencias.
Lejos de ser un capricho estacional, los lunares se consolidan como un recurso estilístico eficaz también en el entorno laboral. Con las combinaciones adecuadas y el enfoque correcto, este estampado aportará sofisticación y un toque atemporal a tus estilos de oficina.
A partir de ahora no podrás vivir sin los lunares, la selección de piezas definitiva:
