Según el maquillador Sean Harris, ser comedidos, pero sin pasarse, es la clave para lograr un maquillaje perfecto de invitada de boda. «Un error común que veo en el maquillaje de las invitadas es que o bien se exagera, lo que al final queda demasiado fuerte en persona, o se opta por un maquillaje tan ultranatural que no luce bien en las fotos», explica.
Desde conseguir la piel más bonita y luminosa hasta cómo evitar que el maquillaje de ojos se emborrone, varios expertos nos dan sus mejores trucos para las invitadas de boda.
Brilla con luz propia
Lucir radiante comienza con la hidratante adecuada y una buena preparación de la piel. La maquilladora profesional Jessica Smalls confía en el primer hidratante de Bobbi Brown para sellar la humedad y partir del lienzo perfecto para el maquillaje. En cuanto a la cobertura, Dalí recomienda usar dos tipos diferentes de base para que solo brilles en los lugares correctos. «Aplica una base de acabado mate y aterciopelado en el centro del rostro, alrededor de los pliegues de la boca, donde la nariz se encuentra con las mejillas, y un toque en el centro de la frente», indica. «Luego, usando otra herramienta, aplica una base ligera con acabado luminoso –como la base Luminous Silk de Giorgio Armani–, en el resto del rostro (y cuello, si es necesario), difuminando bien».
Esculpe e ilumina con suavidad
Cuando se trata de resaltar los contornos (el famoso contouring), opta por usar una barra de contouring en tonos fríos en lugar de polvos bronceadores. Y recuerda: a la hora de esculpir, menos es siempre más: «Nunca me han gustado los rostros con mucho contouring«, dice Carolina Dalí. «El objetivo es definir suavemente los rasgos, no enmascararlos o alterarlos radicalmente«. Con este enfoque, el stick de contouring de Westman Atelier tiene una textura cremosa y fácilmente difuminable en tonos fríos, que imita perfectamente las sombras naturales de la estructura ósea. «Aplica el contouring debajo de los pómulos y a lo largo de la línea de la mandíbula, y luego difúndelo usando una brocha firme», dice Smalls. «Resaltarás los pómulos resalten al instante y la mandíbula se verá más afinada». Una vez que hayas esculpido el rostro, agrega un colorete de aspecto saludable. No solo en las mejillas, sino en todo el rostro. «Aplica un colorete brillante en las manzanas de las mejillas y en todos los lugares donde naturalmente te pondrías sonrosada si pasaras un ratito de más al sol», instruye la maquilladora Jenna Kristina, que sugiere aplicarlo en las sienes, la punta y el puente de la nariz, y a lo largo del contorno de los ojos para “que la piel obre vida”.
Define la mirada
Para preparar el lienzo que evite que el maquillaje de los ojos se emborrone, aplicar un primer «lo cambia todo», dice Kristina, cuyo favorito es el Eyeshadow Primer Potion de Urban Decay: “Es muy transparente, así que no cambiará el tono de tus sombras de ojos y evitará que se mueva el eyeliner«. Kristina apuesta por un look sencillo y limpio, como un suave ojo ahumado o el clásico rabillo pronunciado del cat eye, tanto por estética como por mantenimiento. Dalí subraya que hay que tener en cuenta la fotogenia del look: «Me gusta ceñirme a los colores bronceados, melocotón, tierra y pastel, y prescindir de las sombras de ojos demasiado llamativas, que pueden quedarse anticuadas, y de las oscuras, que en las fotos se oscurecen todavía más y pueden empequeñecer los ojos en las fotos».
