Meliá está dispuesta a traer del Caribe a España su modelo de todo incluido de lujo de la mano de la marca Paradisus. Lo que empezó como una prueba en Gran Canaria y Lanzarote, ahora se consolida con los dos primeros meses de vida de un hotel en Fuerteventura, que esta semana abre al 100% y que se va a convertir en el buque insignia de la compañía para este segmento, tras una reforma de 32 millones de euros, acometida por el propietario del activo, la joint venture formada en 2023 entre Banca March, con un 80% del capital, y Meliá, con el restante 20%.
Situado en la playa de Sotavento, al sur de la isla, el hotel dispone de 363 habitaciones, cuatro piscinas, siete restaurantes y mas de 300 empleados (46 de ellos inmigrantes procedentes de África), el doble de plantilla de la anterior marca que operaba. “El todo incluido de lujo en Caribe es un ejemplo de éxito. Cuando vas de vacaciones con tu familia quieres despreocuparte de todo y es una fórmula muy adecuada”, recalca Gabriel Escarrer, presidente y consejero delegado de Meliá, en una entrevista con Cinco Días.
“Hay que proporcionarles a los clientes comercios para que no tengan que desplazarse lejos y les incluimos hasta cuatro experiencias o viajes dentro del precio”, expone. Preguntado por la posibilidad de ampliar ese modelo a otros destinos del Mediterráneo, Escarrer recalca que el primer requisito es que el destino esté abierto doce meses. “Con los servicios que damos es incompatible con la estacionalidad por los elevados costes fijos en los que incurrimos”. En su opinión puede funcionar en España en algunos destinos de Costa del Sol y fuera de España podría hacerlo en Grecia y en el sur de Portugal.
La marca Paradisus es la más asequible de las cuatro grandes marcas de lujo de Meliá (Me by Meliá, The Meliá Collection y The Gran Meliá), con una tarifa media de 167 euros por habitación y noche en 2024, registrando un crecimiento anual del 4,9% y superando la media global de precios de la hotelera balear (140,9 euros). En el primer semestre de 2025, la tarifa llegó a 181,1 euros, con un alza del 5%. El indicador en el que se fija la compañía, sin embargo, es el Net Promoter Scorer (NPS), que mide la satisfacción del cliente tras su estancia, que alcanza una puntuación de 59 puntos, por encima de la media del sector. Este indicador se calcula restando el número de detractores al de promotores y una puntuación cercana a los 60 puntos apunta a un nivel muy elevado de satisfacción.
El nuevo hotel de Fuerteventura es el decimosegundo hotel de la marca Paradisus. En la actualidad cuenta con cuatro en México, cuatro en Cuba, tres en Canarias y uno en República Dominicana. El decimotercero llegará apenas en un par de meses con la apertura de otro activo de la marca Paradisus en Bali, prevista para diciembre. Este hotel situado en Indonesia fue el primer hotel que abrió Meliá en el extranjero, concretamente en 1985, y está siendo sometido a una profunda reforma para albergar 485 suites, siete villas, cuatro piscinas, ocho restaurantes, doce bares y un spa.
Las renovaciones no solo afectan a los nuevos activos, sino también a los más viejos. Es el caso del Paradisus Cancún, situado en la Playa del Carmen (México), que abrió sus puertas en 2012 con 678 habitaciones y que cerró el pasado verano para someterse a una profunda reforma de 43 millones de euros, que se prolongará durante un año.
A la apertura del Paradisus en Fuerteventura le seguirá el cuarto hotel Zel, la marca que comparte con Rafael Nadal, que estará situado en el edificio colindante que albergaba hasta ahora un hotel de la marca Innside. Las obras de reforma ya se han iniciado por fases y su finalización está prevista para el mes de marzo. El primer activo abrió en Mallorca, posteriormente le siguió otro en Costa Brava y el tercero se estrenó en República Dominicana. Al margen de estos cuatros hay otros dos firmados en México y Albania.