Aunque Estado Eléctrico ha cosechado las que seguramente son las peores críticas para una película de los hermanos Russo de todas cuantas han dirigido, la expectación es máxima. Millie Bobby Brown ya es una figura habitual en el cine de Netflix familiar. Además de los protagonistas y de Stanley Tucci y Ke Huy Quan, los otros dos actores con personajes humanos, el elenco de voces que dan vida a los robots es largo. Anthony Mackie es Herman; Alan Tudyk es Cosmo; Woody Harrelson es Mr. Peanut; Brian Cox es Pop Fly; Jenny Slate es Penny Pal, y Hank Azaria es Perplexo. Es imposible no enamorarse de alguno de estos personajes robóticos, pero ¿cuál es el favorito de los protagonistas? “Nuestras opiniones van a estar completamente sesgadas, pero creo que el tuyo tiene toda la pinta de ser Pop Fly”, responde Brown mirando a sus compañeros. “Pop Fly es un tipo genial, Mr Peanut es fantástico y Penny Pal es adorable”, comparte el actor. “Penny Pal es increíble. Fue con la que mejor me lo pasé mientras rodábamos porque era la que permitía las interacciones más divertidas”, replica el actor.
Chris Pratt ha formado parte del universo Marvel desde hace más de una década, cuando encarnó por vez primera a Star-Lord en Guardianes de la galaxia. Aquella fue la primera ocasión del intérprete a las órdenes de los hermanos Russo. Para Millie Bobby Brown, Estado Eléctrico ha sido la primera. “Te voy a hablar desde mi experiencia, pero creo que el hecho de que tú encuentres como temas principales de la película la amistad y la amabilidad tiene que ver con que eso era exactamente lo que se vivía mientras rodábamos la película. Cuando se da ese ambiente con todo el equipo técnico, los directores y el resto del reparto al final es algo que se traslada a la pantalla. Y eso es lo que ha sucedido aquí”, comparte la actriz.
Estrellas de Hollywood ambas, los actores no se conocían realmente hasta este rodaje. ¿O si? “Realmente, no. Creo que nos cruzamos en dos ocasiones antes de trabajar juntos”, cuenta el actor. “Eso en Hollywood es equivalente a ser mejores amigos casi”, reconoce la actriz entre risas. “Realmente nos vimos creo que fue cuando yo estaba probando mi look y tú ya habías empezado a rodar”, concede el actor antes de que la actriz confiese: “Creo que se me han olvidado las dos primeras semanas de todo el proceso. Estaba tan nerviosa. Quería que todo saliera perfecto y al principio necesitaba asentarme y construir al personaje”. ¿Todavía se pone Millie Bobby Brown nerviosa? “Por supuesto. Creo que en el momento en el que arrancas una película es normal y si no lo haces estás demasiado acostumbrado y la cosa puede no funcionar tan bien. Al final, esto no es la vida real y no es lo que haces en el día a día así que creo que sí, tienes que ponerte nervioso de algún modo, es natural”.
Subyace a lo largo de toda la película la idea de que la relación con las máquinas de la humanidad puede cambiar de un momento a otro. Vamos, hay una guerra de robots contra personas. ¿Asusta esto a los protagonistas de Estado eléctrico? “Realmente no, pero eso no quiere decir que no sea algo peligroso. No me paso el tiempo con ansiedad por lo que significa la tecnología a día de hoy, pero es que tampoco soy una persona a la que casi nada le provoque ansiedad”, explica Pratt. Creo que a mí sí me da miedo en cierta manera porque puede afectar mucho a la gente joven. “Yo sí me paso tiempo preocupada por cómo puede verse el mundo en el futuro, sobre todo para la generación posterior a la mía y la mía propia. Me preocupa cómo puede ser el futuro, pero creo que esta película puede ayudar a seguir un camino en cierto modo más correcto”, concluye la actriz.