El músico Miguel Morales Barreto, miembro de la última etapa de Los Brincos, ha muerto a los 75 años en Madrid. Nacido en Filipinas en 1950, era hermano de Ricky y Antonio, conocido artísticamente como Junior y marido de la cantante Rocío Dúrcal. Junto a sus hermanos, Miguel inició su carrera musical en Madrid, ciudad que le permitió desplegar su talento y ganarse un lugar en la historia de la música española. Su primera experiencia importante fue con Los Pekenikes, banda pionera del pop español. Su cuerpo permanecerá en el Tanatorio Norte de Madrid, donde se celebrará una despedida a las seis y media de la tarde de hoy.
En 1968, Miguel Morales dio un paso más en su carrera al unirse a Los Brincos, banda considerada una de las más importantes y legendarias de la escena pop española de aquellos años. En esta agrupación, reemplazó a Vicente Ramírez. Cuando Miguel llegó a Los Brincos ya no estaba su hermano Junior, que dejó el conjunto años antes para forma el dúo Juan y Junior junto a Juan Pardo, también miembro fundador de Los Brincos.
Migue fue el último de los hermanos en unirse a la banda porque había sido enviado a estudiar a Canarias en un intento de sus padres para que no se dedicara a la música. Posteriormente, formó parte de Barrabás, un grupo que fusionaba ritmos latinos, funk y rock y que lideró Fernando Arbex, también fundador de Los Brincos.
Además de su trabajo con las bandas, Miguel también fue un compositor prolífico. Su talento lo llevó a crear música para varias películas de renombre, entre ellas Entre tinieblas, de Pedro Almodóvar; Escarabajos asesinos, de Steven-Charles Jaffe, y Hay que deshacer la casa, de José Luis J. Sánchez. En el 2000, Morales insistió para volver a reunir a Los Brincos, y se mantuvo activo en la música hasta su muerte.