Seamos sinceros, nada huele (y sabe) a verano como los limones. Inmersos en el buen tiempo, este motivo se convierte en una fantasía cítrica que inunda todo a su paso, con todos los referentes que eso conlleva. A nivel de interiorismo, es la propuesta por antonomasia en el feed de Instagram gracias a firmas como H&M, que invitan a convertir la cocina en un jardín particular. Podemos pensar en tazas, jarras, sal y salpimentero, incluso platos, todo adquiere el color y la forma reconocible de esta fruta. Incluir a Italia en la ecuación es un (efectivo) recurso que hemos visto en editoriales de distintas compañías como Zara Home. No resulta extraño su magnetismo, ya que simplemente su evocación suena a verano infinito, incluso para románticos viajeros de sofá.
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Este momento tan ‘Dolce Vita’ se traslada de la cocina al guardarropa este verano para sustituir todo print inimaginable que asociamos a las vacaciones. Piensa en rayas de colores, o en los atemporales cuadros vichy: todos quedan enclipsados en 2024 por la forma de un limón. Loewe lo convierte en un irresistible monedero al que no le faltan hojas. Si hay una casa que defienda esta estética por antonomasia, esa es Dolce & Gabbana. Temporada tras temporada, la marca incluye este motivo de una forma u otra, y esta vez podemos encontrarla en corsés para combinar con todo pantalón o falda que se nos ocurra. El ‘total look’ también puede pasar por combinar una camiseta de Pull& Bear con unos shorts de Zara para estilismos informales, aunque esta fruta también tiene cabida en conjuntos boho más sofisticados, como los pantalones estampados que hemos encontrado en Cavalli.