Las extraordinarias propiedades saludables de las nueces de Brasil, el fruto seco que no comemos lo suficiente
Si tu estilo de vida incluye comer sano, lo más probable es que ya consumas una amplia variedad de frutos secos, y no solo en el bar durante el aperitivo: las extraordinarias propiedades nutricionales de las almendras, avellanas, anacardos y otros frutos secos están confirmadas por todos los nutricionistas. Pero es posible que en el cóctel que compras habitualmente falte una superestrella de la categoría: las nueces de Brasil, uno de los snacks más nutritivos y un superalimento todavía poco conocido y consumido. Pero siempre se está a tiempo de remediarlo.
Este fruto oleaginoso y antioxidante es la última pasión de las it girls: las nueces de Brasil son ricas en selenio, un oligoelemento que regula el metabolismo y ayuda a controlar el peso (según un estudio publicado en PubMed, ayuda a quemar grasa y a aumentar la masa magra). Además, su combinación de nutrientes –como la vitamina E, con acción regeneradora; la vitamina B6 y el selenio, que favorecen la producción de colágeno; los omega 3 y 6, que refuerzan la barrera lipídica; y el zinc, que combate la inflamación– lo convierten en un alimento impresciendible para quienes aspiran a lucir una piel sana y radiante. En TikTok, pues, las nueces de Brasil han generado una auténtica obsesión: hay quien afirma que dos al día tienen el efecto de un suplemento multivitamínico, desintoxican contra los metales pesados y hacen que el pelo crezca más fuerte y grueso.
Qué son las nueces de Brasil
Las nueces de Brasil son las semillas de la Bertholletia Excelsa, un árbol originario de la selva amazónica de Brasil (uno de los más altos, con una altura de hasta 50 metros), que también crece en otros países sudamericanos, especialmente en Bolivia –uno de los mayores exportadores mundiales de nueces de Brasil–, pero también en Perú, Ecuador, Colombia y Venezuela. Las semillas se guardan en un fruto parecido al coco, y se extraen y secan antes de comercializarse. Frente a la constante amenaza de deforestación de la selva amazónica, la recolección de nueces de Brasil ofrece un rayo de esperanza: se espera que la demanda mundial de este fruto siga creciendo y contribuya a evitar la tala de estos árboles, así como a sustentar a las comunidades locales que lo recolectan.