“Está cálida y hogareña Eau de Toilette combina el aroma ahumado de la madera que arde en la chimenea con notas de madera de guaiac, cashmeran y aceite de clavo de olor. El olor de las castañas asadas se recrea con una mezcla de notas de castañas y aceite de bayas rojas, y las notas dulces de la vainilla refuerzan la cálida y acogedora sensación que produce este perfume”, reza su ficha de producto. No podrían haberlo definido mejor. Por establecer una analogía visual, este perfume que evoluciona sutilmente sobre la piel para replicar los contrastes frío-calor del invierno es como transportarte a una cabaña en el bosque, con las llamas crepitando en un fuego reconfortante mientras nieva al aire libre en un paisaje helado.
Aroma a galletas de jengibre (recién horneadas)
- Ginger Biscuit, de Jo Malone
Galletas recién horneadas con jengibre, nuez moscada y canela fundidos en caramelo, avellanas tostadas con un toque de mantequilla, haba tonka y vainilla. No hablamos de ninguna receta navideña, sino de los ingredientes de un perfume irresistiblemente dulce (apto para diabéticos) de edición limitada de Navidad. “El pan de jengibre tiene un exquisito aroma que hace la boca agua y una textura muy específica. Lo que queríamos conseguir era ese contraste entre la textura mantecosa y granulosa, y la chispa del jengibre”, apuntan desde Jo Malone. El resultado: un elixir que, sin resultar empalagoso, remite al aroma que desprendía el horno cuando de niños nos asomábamos a comprobar cómo evolucionaban las galletas que deboraríamos poco después.
Aroma a nieve recién caída
- Moncler Pour Femme, de Moncler
¿A qué huele la nieve cuando cae? Moncler tiene la respuesta: a flores blancas, jazmín, bergamota italiana y heliotropo, a ‘campo abierto’ con acordes de madera, a la sensación de pureza de la brillante nieve empolvada y, de fondo, a una vainilla natural suave y cremosa. La primera fragancia de la firma viene para revolucionar los perfumes de Navidad no solo por su aroma original y duradero, también por lo especial de su frasco en forma de cantimplora —oda a los orígenes montañeros de la firma y a su icónica chaqueta— que, en el formato de 150ml, puede personalizarse a través de la luz LED mediante una app ad hoc.