Y, por si fuera poco, el hotel acoge una zona en la que huir del caos de la ciudad y relajarse en su piscina cubierta, su sauna o su spa, al igual que un gimnasio 24 horas. Aunque, otro de sus atractivos es su amplía oferta gastronómica, que presenta en sus cuatro propuestas un viaje por todos los sentidos y sabores.
En primer lugar, situada en la planta baja y con vistas a la plaza se encuentra Gioia Pasticceria, una experiencia de auténtica repostería italiana de la mano del maestro pastelero Fabio Berloni, que demuestra el legado centenario de su familia y sus excepcionales técnicas de horneado.
Dejando atrás el dulce, Palazzo Cordusio también ofrece a sus huéspedes un codiciado cóctel bar en el patio del hotel que ofrece una selección de cócteles de autor en colaboración con el barman Giancario Mancino, miembro de The World’s 50 Best Bars.
Ya para comer o cenar se encuentra el restaurante Isola, dirigido por el Brand Chef Francesco Bagnato y con exitosas aperturas en otros lugares del mundo, ya reconocida por la Guía Michelín. Por último, dentro de este enclave de lujo y moda encontramos SACHI, del aclamado cocinero Moon Kyung Soo; este restaurante de especialidad japonesa ofrece varias experiencias gastronómicas a sus clientes, prometiendo llevarlos a un viaje a través de la tradición culinaria del país nipón.
La excursión: Varenna y el lago Como
Siempre que haya tiempo, una de las paradas obligatorias en nuestro viaje a Milán debería ser Varenna y el lago Como. Para llegar, bien en coche o en tren desde la estación central de la ciudad, Varenna es esa ciudad romántica y pintoresca que se inserta en el centro de un precioso lago y se rodea de otros pueblecillos típicos de una estampa de cuento. Una vez allí, lo recomendable es comenzar descubriendo el ‘Paseo de los Enamorados’ – un camino peatonal que conecta el puerto con el casco antiguo del pueblo – , tras esto lo recomendable es pasear por sus callejuelas, visitar las iglesias de San Giovanni Battista y San Giorgio, y disfrutar de un helado o un tradicional spritz en alguna de sus terrazas.