De Osma ya había tenido el placer de presenciar en directo desfiles previos de la casa, pero la Alta Costura siempre supone una experiencia inigualable. Un hito en sí mismo que ella misma define como un universo donde el arte, la artesanía y el lujo convergen. “Lo que más me fascina es la dedicación con la que se crea cada prenda. Hay un profundo respeto por el detalle, por las técnicas tradicionales que han sido perfeccionadas durante generaciones. Es una forma de arte que no está sujeta a las reglas comerciales de la moda, lo que le permite ser tan personal y única”.
Para una ocasión como esta, De Osma se decantó por un look muy en línea con su estilo personal: sofisticado pero natural. “Es de la colección Crucero inspirada en Escocia, y lo que más me enamoró fue cómo captura la esencia del paisaje escocés (las flores) con una elegancia moderna. La textura de la tela y la silueta femenina logran un equilibrio perfecto entre tradición y contemporaneidad”, relataba emocionada.