El estilo de Selena Gomez se define por su gusto por las siluetas clásicas, aunque siempre dejando lugar a incorporar nuevas tendencias
Además de contar con una larga trayectoria bajo los focos, la actriz y cantante es una de las celebridades más implicadas en lo que a labores solidarias se refiere. En este caso, Selena Gomez acudía en Nueva York a la tercera gala anual de Rare Beauty’s Mental Health Summit; un evento fundado por ella misma a través de su marca de cosmética, Rare Beauty, y cuyos fondos se destinan a causas relacionadas con el apoyo de la salud mental.
Como en cada aparición, la autora de Love On sentó cátedra sobre cómo llevar siempre el estilismo más aplaudido –se trate del evento que se trate–, y lo hizo con un diseño midi en color perla y de escote drapeado firmado por el australiano Toni Maticevski. Si bien el blanco (y todas sus diferentes tonalidades) no se escoge normalmente en bodas o comuniones, Gomez ha decidido no renunciar a este color tan favorecedor, y lo ha trasladado hasta otro tipo de silueta: el vestido de cóctel.
Ideado para eventos más distendidos, aunque sin llegar a caer en lo casual, el clásico cocktail dress es la opción perfecta para ese tipo de citas quizá no tan formales, pero a las que se quiere asistir dando rienda suelta a la elegancia. En su caso, Gomez ha emparejado el suyo con unos pumps de Manolo Blahnik en el mismo tono que el vestido, varias joyas doradas que adornaban sus muñecas y dedos, y un bolso de esencia ladylike obra de la firma Aspinal of London.
Gotham