Vanesa Martín publica hoy un disco muy diferente. ‘Casa mía’ se sale de su zona de confort para entregarse a la bachata, a los sintes e incluso al Autotune. Hay una parte más pop-rock en su álbum, y la artista defiende que sus discos siempre han sido variados, pero este es más atrevido y por eso hemos querido preguntarle a qué se debe el cambio.
En pleno Barrio Salamanca en Madrid, la artista nos habla de su inherente versatilidad, de su variado gusto desde siempre y también de cómo ha sido trabajar con Casta, productor detrás de temas de Karol G o Manuel Turizo. Fue en Bogotá donde le conoció a través de Manuel Medrano, con quien Vanesa Martín estaba colaborando, y decidieron dar este paso juntos.
Cuéntame por qué has dado este paso de hacer un disco diferente.
Tenía ganas de salirme de lo que vengo haciendo, salir de mi zona de confort y atreverme a sonidos de vanguardia, a utilizar el Autotune como instrumento. Tenía ganas de probar y de darle un peso a la diversidad que me define.
¿Quieres decir que en ti había una diversidad que no se expresaba antes en tu música?
Mi primer disco ‘Agua’ está cargado de esa diversidad. Después, te vas definiendo. Inconscientemente te vas depurando, puliendo, llámalo X. Empecé a hacer un pop-rock que a mí me define también y que por supuesto también está en este disco. Pero no solo soy eso. Tenía carencias, como llevar a un disco mío la música que escucho yo, la música que suena a diario en mi casa, en mis airpods, en mi coche, y la música de otras culturas que me fascinan. Y mezclarlo con mi identidad.
¿Qué suena en tu casa, en tus airpods?
Pues la verdad que es muy variado: Nanpa Básico, Rels B, Daniela Spalla, Agris, La Guru, Karol G, John Mayer…
¿Tú crees que tu público te imagina escuchando a Karol G o va a abrazar que hagas bachata o electrónica?
La gente que de verdad me conoce y que está conmigo desde hace años y viene a los conciertos, lo va a entender y lo va a agradecer, porque en mis conciertos y en mis discos yo siempre he metido cosas. ‘Ropa desordenada’, por ejemplo, tiene ritmo latino. En el disco anterior metí una chacarera. Yo te puedo hacer 10 canciones que estén enmarcadas -por etiquetarlas de alguna manera, que huyo y odio las etiquetas- en el pop rock. Pero después siempre hay 1, 2 o 3, que, pues eso, es una chacarera, o tango o algo fusionado con noséqué, mezclado con nosécuántos. O sea, siempre te meto algo. Lo que pasa es que en este disco son a conciencia las 12.
¿Entonces lo ves como tu disco más extremo o underground?
Yo sí lo veo, porque no es lo mismo 12 que 2. Y está hecho a conciencia con un productor que es el top 3 de productores más deseados, más cotizados, más premiados y más todo. Tiene esa mezcla de vanguardia y de formación clásica, que es lo que a mí me gusta. Estar yendo y viniendo todo el rato. Cuando me reuní con él, le dije: «yo no quiero que hagas lo que tú ya sabes que yo sé hacer, y lo que la gente presupone de mí. Yo quiero que nos salgamos y que me lleves por derroteros que yo ni conozca». Y empezamos a escuchar música que a día de hoy no sé ni de quién es. No te puedo decir quiénes son, pero empezamos a escuchar música de todo tipo. A mí eso me fascinó. Me encantó. Salí de mí.
Estamos hablando de Casta. ¿Quién es el top 2 y el top 1 en productores…?
¿Cómo?
Me has dicho que Casta es el top 3…
No, que estaría dentro del top 3, no sé si es el top 1, el top 2 o el top 3. Pero él está dentro de esa tríada de cabezas. Que todo el mundo quiere trabajar con ellos. De hecho, cuando le digo a compañeros míos «he trabajado con Casta», me dicen: «¿Cómo, tía? ¿Tú con Casta?». No se esperan que yo me mezcle. Y yo soy eso. La gente que de verdad me conoce en mi día a día sabe que yo soy eso. Pero no sé por qué, a mí siempre se me ha encasillado en una parte más clásica, más cantautora, cuando si vienes a los conciertos y compartes lo que suelo hacer, no soy eso. Yo creo que tiene que ver con la elección de algunos singles, por la radio, por los medios y demás, que te llevan a… «Si ahora se llevan los cuadros naranjas, pues tiene que sonar un cuadro naranja». Y yo no quiero eso. Yo quiero tener la paleta entera para mí.
«No sé por qué, a mí siempre se me ha encasillado como cantautora, y yo quiero la paleta entera para mí»
¿Cuál te parece el tema más loco del disco?
El más loco quizá, ‘Tiempo real’. Mucha gente pensará que ’60’s’. Para mí, ’60’s’ no es tan loco.
Yo era el que iba a decir.
En cuanto al autotune, sí. Pero la melodía de ’60’s’ es súper clásica. Es Jeanette, si me apuras.
Como su propio nombre indica, ¿no?
(risas) Claro. Bueno, es que, precisamente, para mí, los 60 fue la revolución feminista, humanística, de sonidos… Y es que he basado mucho este disco en esos sonidos.
«Los 60 fue la revolución feminista, humanística, de sonidos… He basado mucho este disco en esos sonidos»
Y luego le has puesto un Autotune.
Y luego le puedes echar Autotune para terminar de rizarle.
¿Te has divertido con cacharrería del tipo… distinguir autotune, de melodyne, de vocoder…?
Da igual. A mí me gusta que cuando yo te pongo la canción tú me digas: «Está de puta madre o me gusta o no me gusta». Pero lo demás no voy a entrar en detalles.
Otro momento del disco es ‘Cómo te digo’, que de repente parece una de las canciones más clásicas, pero se transforma en un electrodisco así de diva ochentera.
Yo hice una canción hace un par de años que se llama ‘He sido’, que es también disco y la gente se vuelve loca en los directos. Es una reivindicación. Y como te digo, es como una doble vuelta, precisamente por lo que acabas de decir: es muy ochentera, electrónica… y no sé qué tiene la canción, pero la gente que la ha escuchado y cuando nosotros estamos en los ensayos para la gira, sin darnos cuenta, terminamos bailando, luego saltando, subiéndonos en cosas. No sé lo que tiene esa canción, que genera una cosa salvaje de salirte de ti.
«A Sabina le pongo mis discos desde hace años»
¿Sabina sabía a qué venía? ¿Sabía que iba a salir su canción en un disco bastante diferente?
Yo a Sabina le pongo mis discos desde hace años. Tengo la costumbre y el ritual, antes de meterme a grabar voces definitivas, de ir a su casa y ponerle el disco. Somos muy amigos desde hace mucho tiempo, nos vemos mucho y hablamos de muchas cosas y él sabe todo de mi vida. Me acuerdo que iba a grabar voces y me dijo: «todavía no me has puesto el disco». Entonces me fui a su casa, pensando en cuando escuchara el Autotune: cuando le escuché digo: «Dios mío, a ver por dónde me va a salir». Porque es súper sincero y como tiene que ser, me encanta. Y cuando llegamos a ‘No nos supimos querer’, se sonrió y me dijo «Pónmela otra vez». Y me dijo «Qué pena que no hayas conocido a Chavela Vargas porque probablemente 1) hubierais sido grandes amigas y 2) se hubiera enamorado de ti». Y yo me quedé como «guau. Bueno, pues si no Chavela, tú, que fuiste súper amigo». Esta canción tiene un aire mexicano claramente palpable. Y yo creo que tenía que ser, no sé por qué. Yo creo que era el vehículo de materializar las ganas que teníamos de hacer algo juntos. No podía haber sido otra canción de este disco.
¿Qué te dijo de la parte Autotune, más modernita, más diferente?
«Bueno, bien» (risas) Bien, hay que atreverse, claro, hay que hacer cosas. Bien, bien. Él me decía: «estás en forma, en las letras estás diciendo como las conclusiones». Yo siempre me fijo mucho en las conclusiones de los artistas que escucho, en su manera de pensar, su manera de entender, cómo generan imágenes. Y él me habló muy bonito de lo que yo generaba y de mi manera de rimar, de plasmar imágenes y eso es un regalo que me ha tocado vivir y que agradezco mucho.
Has dicho que has hecho 12 canciones diferentes, pero en realidad hay una parte un poquito más clásica.
He dicho que también está lo que vengo haciendo.
¿Las canciones más clásicas, ‘Tenemos universo de sobra’, ‘Me sucedes’, ‘No nos supimos querer’… son las primeras que escribiste?
No. ‘Tenemos universo de sobra’, sí. Probablemente es la primera canción que escribí para este disco, pero ‘No no supimos querer’ y ‘Me sucedes’ son de las últimas que escribí. Pero tenían ese clima. Las canciones yo creo que tienen un momento para nacer y un clima. Igual que ‘Objetos perdidos’. Claramente se veía que podía ser versátil y tirar para bachata, aunque originalmente fuera una balada. Y yo no quería que fuera una balada. Yo la dejaba fuera del disco por balada. Se la cantaba con la guitarra a Casta y me decía: «Tú no te estás dando cuenta de lo que estás haciendo con la guitarra. Estás tocando una bachata». Y yo: «¿Estoy tocando una bachata con la guitarra?». «Sí».
¿Cuál es tu primera aproximación a la bachata? ¿Es de chiquitita, tipo Juan Luis Guerra?
Juan Luis Guerra. ‘Bachata rosa’. Yo me volví loca con esa canción. Cuando Casta me dijo: «Estás haciendo bachata», me llevó a esta y dije: «yo no me lo puedo creer». Estuve reticente, porque claro, Casta hizo ‘La Bachata’ de Turizo. Entonces yo decía «No, porque vienes de Turizo y Turizo lo petó. Digo «NO». Y me decían: «¿Pero qué más da que haya hecho una bachata? Si esta canción es carne de bachata, ¿por qué no puedes hacer tú una bachata?». La verdad es que tuvimos un gran debate ahí y al final quedó la bachata.
O sea que la maqueta era un poco bachatita, pero luego ya fue superbachata.
La maqueta era como una balada que tenía una guitarra con un ritmo que Casta decía que era casi una bachata. «Si de verdad lo vestimos, estás a esto, estás como pisando de puntillas».
¿Hay un momento del disco en el que he pensado en Paloma San Basilio. Y me acuerdo de que Paloma San Basilio tuvo un disco de electrónica que se llamaba ‘Amolap’ y Miguel Bosé tuvo su disco de electrónica que se llamaba ‘Velvetina’. Yo no sé si tú te has fijado en artistas de pop rock que de repente hicieron un disco un poquito más electrónico, o no conoces estos discos.
Sí, si es que precisamente yo creo que adentrarse en otros universos es muy necesario. A veces solo miramos lo que ahora mismo está de moda. Y no, hay que tirar para atrás. Yo en este disco me he ido a los 60 un montón, y de ahí he venido navegando para adelante. Si me quedo solo en lo que se lleva, creo que hago el periódico de ayer. Sin embargo, yo le dije a Casta: «tienen que ser lo suficientemente antiguo para que sea moderno». No sé si me estoy explicando bien.
«Si me quedo solo en lo que se lleva, creo que hago el periódico de ayer. Lo que le dije a Casta fue: «tiene que ser lo suficientemente antiguo para que sea moderno»»
Es interesante porque es bastante ambiguo porque lo que se lleva ahora mismo sería la bachata, por ejemplo. Yo creo que la bachata está súper de moda, vamos, o sea, ha sacado hoy mismo C. Tangana una bachata.
Sí, pero me refiero a universo sonoro. A lo mejor la gente no es consciente. Por ejemplo, ‘Borgoña’ es una especie de copla, pero en el sonido nos hemos ido atrás, atrás, atrás, atrás… a cómo sonaban los discos de copla en los años 70. Entonces, eso mezclado con mi manera de hacer y obviamente con los sonidos actualizados y porque evidentemente no vamos a hacer una copla 100% de los años 70 porque a lo mejor ya no sería atractiva para la gente, es que actualizas el sonido y lo mezclas con lo que había… Lo asemejo mucho con un chef. Cuando hace unos huevos que tú dices «el huevo está perfectamente hecho», el huevo es más antiguo. Pero después le metes unos chipirones con una salsa de nosécuántos, noséqué. Ya estás haciendo ahí tu universo propio.
«Desde que nació el urbano, [parece que] si no haces urbano, eres indie»
Has dicho que odias las etiquetas como todos los artistas, pero alguna vez he leído «Vanesa Martín, la cantante indie», ¿a ti esto te ha llegado?
He flipado, porque yo de ser cantautora indie ahora… A mí me da igual, porque yo escucho de todo. De adolescente yo escuchaba a Sexy Sadie y a Los Planetas. Pero tío yo… ¿Arde Bogotá tú lo consideras indie?
Yo no, pero buena pregunta, porque están en todos los festivales que se consideran indies.
Entonces, yo ya no sé… Por eso las etiquetas que definen es limitarte.
¿Tú consideras Arde Bogotá indie?
Yo no. Igual que Mikel Izal. ¿Tú lo consideras indie?
No, pero está ahí también.
Y sin embargo, están ahí como en un universo. Cuando dijeron de mí indie dije yo: «Guau, estoy flipando ya. Pero entonces, ¿qué es lo indie?».
¿Esto te puede influir a ti en contratación?
A mí me da igual. Entiendo que si el organizador de un festival ve «Vanesa Martín indie», diga: «¿Qué?».
¿Ves como que te puede perjudicar o algo?
Es que no… A mí me encanta la música indie y yo escucho música indie, pero no sé yo si me consideraría indie. Lo que pasa es que desde que nació el urbano, si no haces urbano, eres indie. Fenomenal, pues bienvenida al indie.