Si me regalan un perfume por Navidad, ojalá que sea este
Mi pasión son los perfumes. Hace tiempo que los colecciono, y desde que tengo uso de razón son lo único que espero con ansia cada Navidad —quien me conoce sabe que para mi son el mejor regalo posible—. Cada año, por consiguiente, encuentro algún paquete bajo el árbol de proporciones similares al año anterior (y al anterior del anterior), pero siempre con un elixir diferente que no descubro hasta llegada la mañana del 6 de enero. Bien, este año será el primero que rompa la tradición: siempre me he dejado sorprender, pero esta vez, si me regalan un perfume por Navidad, ojalá que sea al que dedico estas líneas. Los motivos que me han llevado a escribir esta particular carta a los Reyes Mayos son tan variados como los acordes del perfume en cuestión; con notas de salida de limón, bergamota y mandarina; corazón de rosa, jazmín sambac, nardo y flor de azahar y un fondo de sándalo y vainilla, era casi imposible para una adicta a las fragancias como yo no desearlo. Además, cumple uno de mis requisitos clave (y quizá el más complicado) a la hora de escoger un perfume: no conozco a NADIE que lo use. Lo que significa que seguramente no me toparé por la calle con el mismo olor a diario, no acabará aburriéndome a la mínima de cambio y tampoco coincidiré con mis amigas en cada comida de domingo o salida nocturna. Es, literalmente, único.
28º, la temperatura ideal para pasear por París
“Se llama 28º porque para su creador, esta es la temperatura ideal para pasear por París”, me revelaron las hermanas Fernández Pascual, Isabel y Alicia, el día que visité su perfumería por primera vez. Era la primera fragancia que probaba en el que ya es para mi es el Olimpo de las fragancias de autor, Nadia Perfumería, y podría decirse que fue un amor a primera vista en toda regla. “28° es el punto ideal que evoca las vacaciones y los paseos de verano, que llegan como una ola de calor con bocanadas de monoi, flores blancas y manteca de karité”, leería después en la ficha de producto de su página web. Dos líneas que bastan para resumir a la perfección su aroma, el de una fragancia unisex que transporta a quien la huele a una calurosa tarde de primavera en la capital gala, de esas que actúan como antesala del verano y en las que parece que el tiempo se detiene en unas vacaciones eternas. Ese día viajé sin hacer check in.
Queridos Reyes Magos, sobran las palabras.
