Este mes de agosto, en la estación de Leo, sinónimo de placer, alegría y dejarse llevar, estará marcado por la luna nueva del 4 de agosto, Mercurio retrógrado a partir del día 5 y la luna llena azul del 29.
La luna nueva en Leo del 4 de agosto de 2024: ¿qué nos deparará en los próximos días?
Aunque sigue a la luna llena en Capricornio del 21 de julio, que ya fue portadora de buenas energías, la luna nueva del pasado fin de semana tiene lugar durante la estación de Leo. «La luna nueva en Leo, que tendrá lugar el 4 de agosto, iniciará un ciclo lunar que favorecerá sobre todo la renovación de nuestra relación con la creatividad, la autoexpresión y la necesidad de que nos vean», explican los astrólogos de Moon Omens. «El sol y la luna nueva estarán armoniosamente alineados con Júpiter y Marte en Géminis. Esta configuración sugiere que el próximo mes lunar será muy dinámico y lleno de oportunidades de aprendizaje, crecimiento y expansión. En este momento, podremos beneficiarnos de una oleada de determinación, confianza en nosotros mismos, voluntad de hacer que las cosas sucedan y de actuar conforme a nuestros deseos».
¿La consigna? Reconectar con nuestra versión más auténtica y con los hábitos, decisiones vitales, proyectos y personas que fomentan esa versión óptima y encajan con ella. Cuando la luna nueva aparece oscura en el cielo, es el momento perfecto para mirar hacia dentro y buscar la introspección. La pregunta que hay que hacerse es: ¿a qué quiero dedicar mi tiempo y mi atención?
«Hacía mucho tiempo que las energías lunares no eran tan favorables», dicen los astrólogos de Moon Omens. Así que deja paso a la alegría y al placer. “Es el momento de cambiar tu frecuencia energética hacia lo positivo y enfrentarte a tus facetas más oscuras”.
En la estación de Leo, se exalta la necesidad de expresarse. Expresar nuestra creatividad, nuestra ira o lo que sea que llevemos dentro. Puede ser un tanto incómodo pero estamos llamados, bajo esta luna nueva en Leo, a ser auténticos. También hay una energía romántica. Nos pide hacer caso al corazón, revelar lo que se esconde en su interior. Pregúntate qué es lo que te da vida, qué es lo que más disfrutas haciendo y cómo te gustaría dejar fluir tu creatividad.
